Las personas que tengan en propiedad campos en desuso y quieran alquilarlos ya pueden ofrecerlos al Banc de Terres de València, un registro municipal público y gratuito en el cual también se pueden inscribir los labradores y labradoras interesadas en cultivar esas parcelas. Con este instrumento, que ya está en funcionamiento desde que el pasado lunes entró en vigor la ordenanza que lo regula, el Ayuntamiento mediará entre la oferta y la demanda de las tierras de cultivo en el término de València y asesorará a las dos partes.

La concejala de Agricultura, Huerta y Pueblos de València, Consol Castillo, ha dado cuenta hoy de la puesta en marcha de este servicio gestionado a través del Consell Agrari Municipal con la colaboración de dos entidades con las cuales el Ayuntamiento ya ha firmado dos contratos. Por un lado, ha explicado, «la Fundación Mundubat se encargará de identificar las propiedades agrícolas que están abandonadas y desarrollar campañas para despertar el interés de la propiedad por el Banco de Tierras». Por otro lado, el Colegio de Ingenieros Agrónomos de Levante realizará el asesoramiento jurídico y técnico de los propietarios y arrendatarios y la mediación entre la propiedad y las potenciales personas arrendatarias.

«La vocación de este Banc de Terres es hacer visibles los terrenos que están disponibles en la ciudad y podrían ser aptos para el aprovechamiento agrícola, con la finalidad de optimizar el espacio agrícola, revalorar los terrenos e incrementar la calidad de la huerta», ha explicado la concejala, quien ha concretado que, el primer trabajo es elaborar un mapa con las tierras susceptibles de formar parte de este banco.

A este respeto, ha explicado que, a estas alturas «no se sabe cuántas parcelas conformarán este registro, la inscripción en el cual es totalmente voluntaria». «En cuanto a las parcelas de titularidad municipal en suelo no urbanizable, sólo tenemos tres, con las cuales no podemos contar por diferentes motivos», ha añadido.

En cuanto al interés que puede motivar la propiedad  de suelo agrícola en incluir sus tierras en el Banc de Terres, Consol Castillo ha recordado «que podrán obtener nuevos ingresos, evitar costes de mantenimiento y mantener la capacidad agronómica y productiva de sus tierras gracias a su arrendamiento». Además, «a pesar de que las relaciones son entre particulares, el hecho que esté el Ayuntamiento detrás da seguridad tanto a la propiedad como a las personas interesadas en cultivar esas tierras». Cualquier persona interesada se puede dirigir al teléfono gratuito 010 o darse de alta directamente al portal Banc de Terres de la Diputación.

Por último, la concejala ha explicado que con el Banc de Terres también se pretende dar solución a la problemática ambiental que se deriva del abandono de terrenos, como por ejemplo el incremento del riesgo de incendio, la proliferación de plagas y de roedores, la erosión del suelo, la proliferación de vertidos incontrolados de desechos, la degradación paisajística, etc. «Y por supuesto, evitamos la pérdida de bagaje cultural que supondría la interrupción en la transmisión a las futuras generaciones de los conocimientos de las prácticas agrícolas asociadas», ha conclós..