Ribó: «Si las sospechas se transforman en imputación, Valencia se volverá a convertir en la capital de la corrupción como cuando los trajes de Camps y el caso Gurtel. Unos hechos que perjudican nuestra credibilidad como ciudad»
El portavoz del Grupo Municipal Compromís, Joan Ribó, ha pedido a la dirección del PP que, a la vista de las goteo constante de informaciones que afectan Rita Barberá, se plantee seriamente la posibilidad de sustituir la alcaldesa y el vice-alcalde de Valencia para su imputación, más que probable, está al caer. «Valencia no se merece tener que sufrir la vergüenza de estar gobernada por personas imputadas». Por otra parte, la misma doctrina Fabra, que ya ha hecho el PP en las Islas Baleares abunda en la misma dirección. «Un camino imprescindible para empezar a sanear el agobiante peso de la corrupción en la política de nuestro País».
Compromís le ha exigido a la alcaldesa D ª Rita Barberá que, en caso de ser imputada, no utilice la conocida frase de «Estaré encantada de poder declarar y Decir la verdad delante del Juez» que han utilizado en el pasado sus compañeros Francisco Camps, Ricardo Costa, Enrique Crespo etc. «Sería demasiado histriónico que quien nunca ha querido decir prácticamente nada del tema ahora manifieste estar encantada de hacerlo». Sencillamente no lo creerá nadie», afirmó Ribó.
El círculo está estrechándose cada día más en torno a los presuntos responsables del caso Noos en Valencia. Las noticias aparecidas a lo largo de ayer en los medios: Citación a declarar a González Pons, ratificación del Tribunal de Cuentas del talante público de la Fundación Turismo Valencia y, sobre todo, la información procedente de la fiscalía de Palma que ve indicios de delito de prevaricación en el comportamiento de Rita Barberá y Francisco Camps, colocan la imputación de Rita Barberá como una posibilidad que cada vez se convierte en perfectamente posible y altamente probable.
El portavoz de Compromís ha señalado que «cualquier imputación es grave. Pero ésta, de producirse, es fruto de un trabajo de investigación que ya dura mucho tiempo y papel y, por tanto, estará más que motivada. El fiscal ha mencionado un de los peores delitos de un gobernante: Prevaricación, dictar una resolución conociendo su injusticia o arbitrariedad». Por supuesto, para Ribó, «no es una buena noticia para Valencia. Si las sospechas se transforman en realidad, Valencia volverá a convertirse en capital de la corrupción como ya ocurrió con los trajes de Camps y el caso Gurtel. Unos comportamientos, unas sospechas y una posible noticia que perjudican gravemente nuestra credibilidad como ciudad y, sobre todo, dificultan en cara más la salida económica de la actual crisis como reiteran muchos empresarios”.