Las alegaciones que ha hecho Joan Ribó, portavoz de Compromís, se centran en propuestas para mejorar la situación del transporte público, los peatones y el uso de la bicicleta frente a los del coche privado
El portavoz de Compromís por Valencia, Joan Ribó, ha presentado hoy las alegaciones de Compromís al Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS) de la ciudad de Valencia. Estas alegaciones están organizadas en siete bloques: consideraciones generales, peatones, uso de la Bicicleta, transporte público, transito privado, aparcamientos, planeamiento y participación ciudadana.

Joan Ribó ha declarado: ”En Valencia todo está planificado y diseñado en función del coche privado. El espacio público es de todos, es limitado y entre todos hace falta repartirlo de forma amigable. Nuestra prioridad son el transporte público, los peatones y los ciclistas. Sólo con estos planteamientos tendremos una ciudad más amable, avanzada y respetuosa con todos sus habitantes.

El objetivo de Compromís es conseguir planificar la movilidad en función de todos los sectores implicados, mejorando los itinerarios de peatones, avanzando decididamente en la peatonalización de la zona centro.
Dentro de las medidas para fomentar el uso de la bicicleta, Joan Ribó ha apostado por desplazar el carril bici de la acera a la calzada para mejorar la seguridad de los ciclistas, permitir la doble circulación en las calles 30 y ampliar las plazas de aparcamiento especialmente en los edificios y actividades con gran afluencia de personas.

Compromís considera imprescindible mejorar la velocidad comercial de los autobuses de la EMT, empleando plataformas reservadas y poniendo en marcha la priorización semafòrica cómo indica la ley vigente. Con la mejora del transporte público y de los ciclistas, el objetivo es conseguir disminuir la entrada de vehículos privados en Valencia, además habría que jerarquizar y ordenar el tráfico rodado ampliando las zonas 30 en perspectiva de conseguir una ciudad 30.

En el apartado de aparcamiento las alegaciones de Compromís van encaminadas a extender la zona naranja, únicamente para residentes, a todo el centro histórico y el Ensanche y en la misma línea transformar parte de los aparcamientos públicos en exclusivos para residentes. Desplazar el aparcamiento de motocicletas de las aceras hacia zonas delimitadas en la calzada.

Joan Ribó considera primordial poner en marcha un Plan Metropolitano de Transporte Sostenible que favorezca la accesibilidad, no la movilidad. La carencia de un plan y de una entidad metropolitana que gestione la movilidad ocasiona la imposibilidad de tener un Contrato Programa con el Estado cómo tienen las ciudades de Madrid, Barcelona y otras ciudades.

Joan Ribó ha finalizado: “Nos gustaría pensar que este Plan se ha hecho para cumplirse pero tenemos muchas dudas, en primer lugar el origen del Plan se ha hecho por imperativo legal, para cobrar las subvenciones estatales, la Ley de Economía Sostenible obliga a que las grandes ciudades disponen de un Plan de Movilidad. La carencia de diagnóstico y valoración de la situación actual, nos hace pensar que el equipo de Rita Barberà continuará con los paradigmas de movilidad que han regido esta ciudad los últimos veinticinco años, y no es otro que el coche privado es el rey y todo se tiene que hacer y planificar pensando en él.”

 

Enlace alegaciones http://compromispervalencia.org/legislatura/al%C2%B7legacions-al-pla-de-mobilitat-urbana-sostenible-de-valencia/