Ribó ha participado en la tradicional procesión cívica, con la bajada de la Senyera desde el balcón del Ayuntamiento.
El portavoz de Compromís ha emplazado a la ciudadanía a vivir plenamente una jornada festiva sin dejar de lado la reivindicación de una financiación más justa para el conjunto del territorio y para la ciudad de Valencia, maltratada económicamente por los actuales gobiernos central y de la Generalitat.
Los concejales de Compromís en el Ayuntamiento de Valencia han participado este mediodía en la tradicional procesión cívica, que ha empezado con la bajada de la Senyera desde el balcón del consistorio, como en cada Nou d’Octubre. La celebración del día del pueblo valenciano, ha dicho el portavoz Joan Ribó, “tiene que resaltar la importancia de las fiestas populares valencianas y, a la vez, es un buen momento para reivindicar, para exigir aquello que nos corresponde como ciudadanía”. En este sentido, ha emplazado a los vecinos de la ciudad a vivir plenamente la jornada festiva sin olvidar que en estos momentos de cambio político hay que mostrarse firmes ante el agravio comparativo que sufrimos los valencianos, “sin que el actual equipo de gobierno mueva ni un dedo para mejorar la situación”.
Joan Ribó ha destacado cómo una de las señas de identidad de los valencianos tendría que ser tener unas buenas dotaciones e infraestructuras, y una financiación justa: “unas peticiones en las que trabajamos cada día desde Compromís frente a unos Presupuestos Generales del Estado que, nuevamente en el 2015, despreciarán la ciudad de Valencia con el visto bueno de Alberto Fabra, Rita Barberà y el PP”.
Así, ha continuado Ribó, Valencia continuará en 2015 sin un contrato-programa que financie el transporte público como lo tienen Madrid, Barcelona o Canarias; sin un túnel pasante para el ferrocarril que acabe con el parque de vías en el centro de la ciudad, como ya ocurre en Madrid, Barcelona, Girona, Zaragoza o Córdoba: “¿para cuándo el Parque Central que Barberà ya anunciaba en 1991?, ¿Para cuándo el Estado financiará como corresponde el Palau de les Arts, como ya hace en el Teatro Real de Madrid (9 millones de euros), el Liceu de Barcelona (7 millones de euros) o la Maestranza de Sevilla (1’6 millones de euros)?” Actualmente, el Palau de les Arts tiene una dotación de tan sólo 423.000 euros.
El próximo Nou d’Octubre, afirma rotundo Ribó, “celebraremos que los valencianos tenemos un nuevo gobierno municipal que tiene claras las señas de identidad culturales, económicas y sociales”.