El portavoz del Grupo Municipal de Compromís, Joan Ribó, ha lamentado que “Rita Barberà ha perdido los 4 años de la legislatura sin hacer esa auditoría. Su irresponsabilidad ha supuesto dificultar al máximo el pago de las facturas de la luz. La alcaldesa de Valencia nos ha puesto en el mapa como la capital de la contaminación lumínica y del derroche energético”.
El portavoz del Grupo Municipal de Compromís, Joan Ribó, ha lamentado “la hipocresía del equipo del gobierno del PP, que a dos meses de las elecciones se le ocurre hacer una auditoría del alumbrado público. Rita Barberà ha perdido los 4 años de la legislatura sin hacer esa auditoría, cuando desde Compromís lo propusimos al entrar en el Ayuntamiento, ya en 2011. Y Barberà se opuso a nuestra propuesta a pesar de que las dificultades del consistorio para pagar la factura de la luz por su irresponsabilidad han ido aumentando, desde los 7 millones de euros del año 2004, a los cerca de 19 millones presupuestados para este año. La alcaldesa de Valencia nos ha puesto en el mapa como la capital de la contaminación lumínica y del derroche energético”.
Hay que recordar que, según el Grupo de Estudio de la Contaminación Lumínica de la Universidad Complutense de Madrid, si España es unos de los estados con más gasto energético, con 118 Kw por habitante, frente a los 48 de Alemania o los 40 de Holanda, en la ciudad de Valencia esta cifra se dispara hasta los 137 Kw por habitante, según datos de su último informe del 2012.
El portavoz de Compromís, Joan Ribó, ha propuesto en varias ocasiones un apagón parcial de farolas allá donde no sean necesarias, pero el equipo de gobierno del PP sólo lo ha hecho en contadas ocasiones y durante algunas semanas. En los primeros 20 años de gobierno del PP en la ciudad de Valencia, el equipo de gobierno gastó más de 110 millones de euros sólo en reparación y conservación de farolas. Una cifra a la que hay que sumar otros 64 millones en nuevos fanales. Según ha dicho Ribó, “no entendemos qué necesidad hay de dirigir farolas hacia el cielo, en vez de hacerlo hacia el suelo, que es donde están las personas. Tampoco entendemos que haya barrios de la ciudad con una sobresaturación lumínica sin que vivan demasiados habitantes, como es la zona de las Moreras, donde no se ha construido por la crisis. El PP no ha puesto en marcha ningún Plan de Ahorro y Optimización del Alumbrado Público, y ahora vienen los lamentos. De nada vale añadirse al Pacto de Alcaldes, en el Plan de Acción Europeo para la Eficiencia Energética, si las buenas palabras no se convierten en hechos”.
¿Quieres escuchar a Joan Ribó defendiendo que la auditoría del alumbrado público llega tarde, después de que Compromís la pidiera en 2011? Dale al Play!