El Ayuntamiento de Valencia, mediante la Concejalía de Conservación de Áreas Naturales y Devesa-Albufera que dirige Sergi Campillo, ha anunciado la adquisición de una cámara específica para el crecimiento de plantas que se incorpora al equipamiento de los viveros municipales del Saler.
Cómo es conocido, en los viveros municipales se reproducen plantas autóctonas utilizadas en los trabajos de conservación y recuperación de los varios hábitats que conforman el Parque Natural de la Albufera. En total se supera el centenar de especies con las que se trabaja, algunas de las cuales requieren unas condiciones de cultivo muy específicas. Esto comporta la necesidad de utilizar cámaras para el crecimiento como la que se acaba de adquirir.
La nueva cámara de crecimiento es un habitáculo donde se pueden recrear unas condiciones ambientales muy concretas para facilitar el desarrollo óptimo de las plantas mediante el control de la luz, de la temperatura y de la humedad. Tiene unas dimensiones de 1,83 metros de alto, 70 centímetros de ancho y 76 de profundidad y su capacidad es de 294 litros. Además, está dotada de una alarma para detectar fallos de suministro eléctrico y otra visual para las otras temperaturas o que estén fuera del segmento necesario. Su coste ha sido de 13.848,63 euros.
“Con esta cámara que ahora incorporamos podremos realizar ensayos de viabilidad y germinación de entonces de las plantas que utilizamos para recuperar y conservar la Devesa y la Albufera. Es importante que la tarea fundamental que se realiza a los viveros municipales de El Saler esté reforzada con una apuesta clara del gobierno municipal para dotarlos de aquello que necesitan para conseguir sus objetivos”, ha explicado Campillo.
Por otro lado, el Servicio Devesa-Albufera también ha visto actualizada la sonda de la Gola de Pujol que permite controlar la calidad del agua. El Consistorio ha contratado los servicios de revisión y limpieza de todos los sensores de la sonda, así como la actualización del sistema de presa de datos, comunicaciones y monitoritzación de todo el equipo. En total se han invertido 11.071,50 euros.
“Resulta fundamental mantener en un estado óptimo el equipo con que controlamos la calidad del agua, que está conformado por el sistema de adquisición y remisión de datos y la sonda multiparamètrica encargada de la grabación de las condiciones fisicoquímicas de ese enclave. La actuación municipal era necesaria, sobre todo porque el equipo está instalado al aire libre, muy cerca de la mar y, consecuentemente, está sometido a condiciones ambientales fluctuantes y agresivas. Además, el sistema de comunicaciones estaba totalmente obsoleto”, ha explicado Campillo.
El sistema ahora se encuentra en fase de pruebas.