La comisión municipal de investigación sobre el caso conocido como “Operació Taula” se reunirá, el próximo 31 de enero, para acordar propuestas que mejoran el funcionamiento de los Grupos Políticos del Ayuntamiento. Además, en este encuentro, que se celebrará a puerta cerrada, se establecerán métodos para controlar las contrataciones públicas y los procedimientos administrativos,  y se concluirá la investigación abierta para depurar las responsabilidades políticas por el presunto caso de blanqueo de capitales que según el sumario del “caso Taula” tuvo lugar al Grupo Municipal Popular.

Así lo ha anunciado el concejal y presidente de esta Comisión, Carlos Galiana, al final de la reunión que se ha celebrado hoy, “un encuentro en el que ha quedado claro que todos los grupos políticos llegaremos a un acuerdo para revisar los mecanismos de control y supervisión de las adjudicaciones y contratos, con propuestas para que los supuestos hechos no se vuelven a producir”.

Carlos Galiana, que ha recordado que el objetivo de esta Comisión “era determinar las posibles responsabilidades políticas derivadas de los hechos de carácter ilícito que hayan podido cometer en el Consistorio miembros del Grupo Popular Municipal que están siendo investigados en los tribunales”, ha añadido que a la hora de concluir sobre las comparecencias pedidas “no será posible el consenso, puesto que no ha habido voluntad y muchas de las personas citadas no han querido comparecer”.

Por su parte, y respecto de las propuestas de estudiar los expedientes de contratación de los contratos que aparecen mencionados en el Caso Taula, que ya han llegado al Ayuntamiento sobre La Rambleta, el concejal Carlos Galiana ha manifestado “que la presunta corrupción no se puede encontrar en esos papeles que son documentos administrativos”.

“En realidad, la presunta corrupción se da antes y en el proceso de concesión, con favores de los que no queda constancia por escrito con la firma, tal y cómo sospechamos algunos grupos municipales”, ha afirmado Galiana.