El Ayuntamiento de València, mediante la Concejalía de Movilidad Sostenible, ha ampliado la adecuación de la velocidad máxima permitida en el barrio de La Carrasca y ha reforzado su señalización. El objetivo es pacificar el tráfico y mejorar así la seguridad vial en este barrio, en el distrito de Algirós, donde se incrementa la zona por la que se puede circular a una velocidad que no supere los 30 kilómetros por hora.
“Consideramos fundamental reforzar la seguridad vial en un entorno donde se sitúan varios centros escolares, como por ejemplo el de la Virgen del Pilar o el C.P. Federico García Lorca, motivo por el cual la buena señalización y la pacificación del tráfico son especialmente importantes”, ha explicado el concejal de Movilidad Sostenible, Giuseppe Grezzi.
La nueva zona del barrio en la que se adecua la limitación de la velocidad máxima a 30 km/h se ha delimitado tanto con señalización vertical como horizontal. Se han fijado marcas viarias en los accesos al barrio por las calles de Gorgos, Santa Cruz de la Zarza, Rubén Darío, Palància y la vía de servicio de la avenida de Blasco Ibáñez. El perímetro de estos accesos lo delimitan la calle Clariano y las avenidas de Catalunya y de Blasco Ibáñez.
Por otro lado, también hay nueva señalización de refuerzo en el área rodeada por las calles Clariano, de Albalat dels Tarongers y de Ramon Llull y la avenida de Blasco Ibáñez, donde ya estaba establecida la zona 30; en concreto, en los accesos al barrio por las calles de Gorgos, del Vinalopó, del Doctor García Donato, de Leandro de Saralegui y del Poeta Artola, donde se ubica la escuela infantil municipal Pardalets.
“El objetivo de esta intervención es, como hicimos la semana pasada en el distrito de Campanar, incrementar la seguridad de los peatones, disminuir el peligro en las proximidades a los centros escolares y hacer del barrio de La Carrasca un espacio más amable”, ha explicado Grezzi.