Los trabajos de la segunda fase del Parque Lineal de Benimàmet, que empezaron el pasado 7 de junio, estarán finalizados el próximo mes de enero. Con estas obras, el Ayuntamiento salva las incompatibilidades del proyecto anterior con el trazado subterráneo del metro y consigue “este esperado e importante futuro espacio verde” para la ciudad de València.
La construcción de este parque se ha alargado como consecuencia de la losa del metro, que en el punto más estrecho tiene once metros, e impide que se planten encima árboles o plantas, puesto que en el futuro las raíces y el riego podían causar daños en las infraestructuras del metro. “Esta cuestión no se tuvo en cuenta en el diseño del anterior equipo de gobierno del PP”, ha recordado el concejal de Movilidad Sostenible, Giuseppe Grezzi, y, por eso, Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana, FGV, no emitió informe favorable del proyecto.
Este diseño “modificado” presentado en mayo por la Concejalía de Movilidad Sostenible incluye la preservación de la losa sin riesgos y la redistribución de las especies arbóreas, lo cual supone un incremento del presupuesto del 6,72 por ciento. Así pues, se ha redibujado el carril bici para hacerlo coincidir con la losa superficial, que será zona de paseo para peatones. También se ha redistribuido la zona de juegos infantiles y se ha reorganizado el entorno del ejemplar de eucalipto protegido existente.
Por otro lado, se ha optado por desplazar el arbolado a los márgenes del parque y para eliminar así unos viales “que aumentaban el tráfico de vehículos”. Respecto a los viales ubicados junto a la zona verde en los que anteriormente se preveía doble dirección de vehículos han pasado a ser de un carril de única dirección. Además, el diseño modificado prevé también la rehabilitación y el acondicionamiento de la plaza de Luis Cano, que incluirá jardinería, pavimento y zona de juegos infantiles, y la rehabilitación también de la Estacioneta, “que se convertirá en uno de los puntos de encuentro del barrio”, ha manifestado Giuseppe Grezzi.