El Ayuntamiento de València ha enviado al ministerio de Fomento el documento donde se recoge la propuesta alternativa de ampliación de la V21 en su entrada en Valência, después de que el Ministerio decidiera aplazar la reunión con el Consistorio prevista para el mes de noviembre pasado. La propuesta municipal recupera entre el 53% y el 62% de huerta, puesto que el proyecto previsto por el ministerio de Fomento se asentaría sobre más de 80.000 metros cuadrados de suelo rural, el 85% de los cuales es huerta protegida. El alcalde de València, Joan Ribó, espera que “el Ministerio atienda esta propuesta, lógica y viable, que permite a la ciudad contar con las infraestructuras necesarias sin arrasar el patrimonio paisajístico, cultural y económico que es la huerta de València”.
El documento enviado por el Ayuntamiento de València al Ministerio detalla las modificaciones planteadas por el Consistorio. Así, la principal modificación se basa en la reserva del dominio público, que se reduce de los 8 metros de amplitud originarios a 2 metros, a contar a partir del terraplén o de la línea exterior de la carretera. Además, a los 2 metros de reserva se añaden 5 metros sólo allá donde es necesaria la construcción de una vía de servicio para la accesibilidad de vecinos y usuarios, tal como marca la legislación estatal. Por otro lado, el Ayuntamiento plantea en su propuesta que se revierta a terrenos de huerta aquellos tramos que durante la obra se hayan ocupado para el paso de maquinaria.
Estas modificaciones “lógicas y viables”, en palabras del alcalde Joan Ribó, supondrían la reducción de un 53% de afección a la huerta protegida, manteniendo todavía algunos caminos de servicio que, en caso de no considerarse necesarios, reducirían esta afección hasta un 62% respecto a la propuesta actual del ministerio de Fomento.
Así, hay que tener en cuenta que el suelo total afectado en la propuesta de Fomento es de 80.807 metros cuadrados, que prácticamente en su totalidad (99’97%) son suelo rural no urbanizado. El 85’68% de ese suelo corresponde a huerta protegida (68.621 metros cuadrados). Las afecciones de huerta, con la propuesta del Ministerio en la mano, se producen, además de por la ampliación de la autovía, por la reserva de dominio público que se hace para futuras ampliaciones y por la construcción de vías de servicio laterales; dos razones, estas últimas, que el Ayuntamiento propone reducir para proteger al máximo posible los terrenos de huerta. Así, la proposición del Ayuntamiento incluye recuperar hasta 36.541 metros cuadrados de huerta frente a una afección que se reduciría a 32.079 metros cuadrados, destinándose a vías 5.930 metros.
La alternativa planteada por el consistorio, de esta manera, “supone una propuesta lógica y viable, que permite a la ciudad contar con las infraestructuras necesarias sin arrasar con el patrimonio paisajístico, cultural y económico que es la huerta de València”, según ha remarcado el alcalde Joan Ribó. Incluso supone una reducción en el gasto económico respecto al proyecto original de Fomento y no resultaría necesario volver al inicio del proceso administrativo, ni incrementar los plazos previstos, puesto que con un modificado del proyecto sería suficiente. El modificado es una opción para llevar adelante cambios en los proyectos de obra pública sin alterar excesivamente los plazos que prevé la legislación para casos como este.
El alcalde de València ha recordado que la V21, a su paso por València y las poblaciones limítrofes, “atraviesa un espacio de altísimo valor patrimonial, cultural y ambiental, que es testigo excepcional de la cultura y el desarrollo económico a lo largo de la historia de València desde hace siglos; unos factores a los que se une el importantísimo valor ambiental que recoge la Ley de la Huerta”. De hecho, este tipo de huerta es única en toda Europa, y es una de las razones por las cuales ha sido reconocido como Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO el Tribunal de las Aguas, así como lo es también la dieta mediterránea. Unos valores que ha defendido València ante Naciones Unidas mediante su organismo encargado de las políticas alimentarias, la FAO.
Es más, el Ayuntamiento de València remarca que para la ejecución de la obra de ampliación de la V21 a su entrada en la ciudad y la posterior integración ambiental y paisajística, se tiene que contemplar y seguir los planteamientos de la Ley de la Huerta y su Plan de Acción Territorial, cuya aprobación está prevista para antes del verano de 2018.
El pasado 3 de noviembre debería haberse celebrado una reunión con el secretario de Estado de Infraestructuras, Transporte y Vivienda, Julio Gómez Pomar, que finalmente no se produjo al ser aplazada por el propio ministerio de Fomento. Desde entonces, el Ayuntamiento ha emplazado en varias ocasiones al Ministerio a un encuentro urgente para abordar las posibles alternativas a la ampliación de la V21 en su entrada a València. Dado el interés del propio Ayuntamiento en abordar esta cuestión, se ha trasladado al ministerio de Fomento el documento de alternativa a la ampliación de la V21 para avanzar en la consecución de esta infraestructura a la vez que se respeta la huerta protegida.
Finalmente, a pesar de que no se contempla estrictamente como parte integrante del proyecto de ampliación de la V21 a su paso por València, el Consistorio ha recordado que tanto el Ayuntamiento como la Generalitat rechazan el trazado que plantea el Ministerio respecto al denominado Acceso Norte al Puerto de València, considerado inasumible tanto por el actual Consell, como por el anterior, teniendo en cuenta precisamente la protección de la huerta, la ordenación de territorio como competencia propia de la Comunidad Valenciana y la situación actual de infrafinanciación de la Generalitat.