El Ayuntamiento de València ha ejecutado un total de 766.169.683 euros del presupuesto municipal de 2017. Esto es un 87% de la caja presupuestaria del consistorio. Así lo ha anunciado el propio alcalde, Joan Ribó, en una rueda de prensa en que ha estado acompañado por el concejal de Hacienda, Ramón Vilar. El alcalde se ha mostrado satisfecho de una cifra que demuestra que el Govern de la Nau “apuesta claramente por mejorar la vida en los barrios y por dar estabilidad a la situación económica del Ayuntamiento”. Las inversiones totales ejecutadas han llegado a los 83.376.568 euros, “una cifra histórica”, tal y cómo ha dicho el alcalde.
El grado de ejecución por capítulos ha sido del 95% en gastos de personal, del 94% en gastos corrientes, del 76% en gastos financieros, del 100% en activos financieros y del 98% en pasivos financieros. Las inversiones totales ejecutadas han llegado a los 83.376.568 euros. Porcentualmente es un 53%, quedando un remanente del 47%, es decir, 73.686.160 euros “que no se pierden” tal y como ha indicado el alcalde, puesto que 53.711.670 euros pasan automáticamente al presupuesto municipal de 2018. El resto (19.974.490 euros) pasarán al presupuesto de 2018 a través del remanente de tesorería de 2017.
Hay que tener en cuenta que los presupuestos municipales de 2017 se vieron modificados en el pasado mes de julio, después de que se aprobaran los Presupuestos Generales del Estado. Fue en ese momento cuando el capítulo de inversiones aumentó “considerablemente”. “Esa tardanza en poder disponer del remanente de tesorería y la tardanza al aprobar el EDUSI, los PIP y el resto de inversiones cofinanciadas por otras administraciones, es lo que ha provocado que un porcentaje de inversiones se tienen que ejecutar en el ejercicio actual”, ha explicado Joan Ribó. Así, del total del remanente, 53.711.670 euros tienen la financiación afectada y el resto no.
Las inversiones con financiación afectada engloban las diferentes inversiones financieramente sostenibles, “que ya están en contratación y ya han sido autorizadas, es decir, ya han superado la fiscalización pertinente” ha explicado el alcalde. Se incluyen aquí los programas como el PIP (Plan Confianza) y aquellas partes cofinanciadas por otras administraciones, como es el EDUSI (financiado al 50% por la Unión Europea), o el ARRU (en la parte financiada por la Generalitat y el Gobierno central). Por otra parte, las inversiones sin financiación afectada son las que corresponde sufragar al Ayuntamiento, y que ascienden a 19.974.490 euros. Se incluye en este caso la parte de financiación correspondiente al Ayuntamiento en el EDUSI y el ARRU y, nuevamente, formará parte del remanente de tesorería del 2017 cuando se aprueben los Presupuestos Generales del Estado de este año. Para hacer frente a esta contingencia y “falta de decisiones por parte del Gobierno central” el Ayuntamiento pedirá un crédito de 25 millones de euros, tal y cómo ha aprobado la Junta de Gobierno Local de hoy.
25 MILLONES DE EUROS PARA AVANZAR EN INVERSIONES
El alcalde ha lamentado que “las ciudades tengamos que esperar la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado u otra ley que permita el uso de los remanentes de tesorería”. Esto, según ha explicado posteriormente “es un chantaje del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, a las ciudades que cumplimos y estamos gestionando muy bien nuestras cuentas”. El alcalde ha explicado que este crédito, aprobado hoy por la Junta de Gobierno Local, lo han denominado ‘puente’, “por ser un medio que hemos diseñado para solventar una deuda hasta que podamos disponer del remanente de tesorería”.
Así las cosas, el alcalde ha reclamado en el Gobierno central que active los mecanismos para aprobar un decreto-ley que autorizo el uso del remanente de tesorería porque, de otra manera, el Ayuntamiento se ve obligado a buscar soluciones alternativas como el crédito anunciado.