Compromís per València ha lanzado una campaña que, con tono de humor, ridiculiza las medidas reaccionarias del gobierno de PPVox en el Ayuntamiento. Así, «Catalá de Torrent» y «Mazón de la Puebla» protagonizan un programa de fiestas ficticio repleto de referencias a las polémicas decisiones de la alcaldesa en los últimos meses.
«Nueve de Octubre: Fiestas populares y gran corrida» así reclaman la atención de los peatones los más de 1.000 carteles de Compromís con estética taurina que los valencianistas han puesto por toda València para ridiculizar las medidas de los primeros meses de gestión de Maria José Catalá como alcaldesa de València.
Los carteles imitan la estética clásica de los carteles taurinos e incluyen un programa de festejos ficticio donde aparecen referencias a diferentes iniciativas políticas “retrógradas” impulsadas desde el Ayuntamiento de València.
A las 9h se anuncian toros embolados en la calle Cavallers, en clara referencia a la decisión de Catalá de recuperar el bou embolat en el municipio. A las 10h, Misas y Rosarios contra el carril bici. A las 11h «Gran Encierro en Picassent», en referencia a los numerosos condenados por corrupción de la etapa de gobierno anterior del PP. A las 12h Te Deum “por los caídos en el juzgado” haciendo sátira de la pretensión de Catalá de obligar a los concejales y concejalas a asistir al Te Deum si quieren ser portadores de la Senyera en el 9 de Octubre. Y a las 14 Paella “chagant” con chorizos, “de los que no se comen”, apuntan desde la coalición valencianista.
El evento central es una corrida de toros: “La Gran Corrida” a cargo de la “Ganadería Gürtel” el precio para la cual se expresa en antiguas pesetas y distingue entre zona “de sombra” a 10.000 y zona “Cara en el Sol” a 6.000pts.
El programa de fiestas no se olvida de los más pequeños para los que programa un taller de “himbenta tu propia hortografía prehistorica” en referencia a la intención de Catalá de oficializar el nombre de València con acento cerrado yendo contra la legalidad y las normas ortográficas.
“Con esta campaña se pretende, desde el humor, transmitir la visión anticuada y obsoleta que la alcaldesa Catalá, y sus socios en huelga de brazos caídos de Vox, tienen para la ciudad de València. Una visión en blanco y negro que no se corresponde en la València multicolor, orgullosa y moderna de 2023, que con el gobierno de Joan Ribó se logró posicionar como referente europeo en diversos ámbitos de vanguardia”, han apuntado desde Compromís per València.