La formación valencianista reclama el retorno al diseño original de la vía emanado de Movilidad Sostenible: descartando el túnel, reduciendo el tráfico y respetando la prioridad del transporte público.

Como la primera “gran oportunidad perdida del gobierno de María José Catalá” han bautizado desde Compromís per València la maniobra del gobierno del PP y Vox n el Ayuntamiento de València para —tras un inicial anuncio sosteniendo lo contrario— no eliminar el túnel de la Avenida de Pérez Galdós y mantener todo el tráfico existente en la actualidad en esta autopista urbana que el gobierno de Joan Ribó tenía previsto renaturalizar.

“Es una oportunidad perdida de Catalá para eliminar una de las autopistas urbanas que quedan en la ciudad, pero no solo para eso. También para decirle a los vecinos que su opinión contará algo mientras ella gobierne; para descarbonizar la ciudad, porque la disuasión del tráfico es un beneficio colectivo; y para que esta tan necesaria mejora nos cueste 10 millones de euros menos, porque lo que pretenden hacer no contará con la financiación europea”, ha señalado la portavoz de Compromís, Papi Robles.

Lo ha hecho en una rueda de prensa junto al concejal Giuseppe Grezzi, en la que la formación ha anunciado que —a través del futuro eurodiputado Vicent Marzà— denunciará la anunciada reversión del proyecto ante la Comisión Europea, y se ha comprometido a eliminar el túnel cuando vuelvan al gobierno en 2027, independientemente de lo que haga hasta entonces la corporación dirigida por María José Catalá. Del mismo modo han advertido que están estudiando la legalidad de los movimientos del gobierno municipal respecto a la actuación, dado el valor contractual que tienen los concursos de ideas y cambiarlos sin motivación puede tener consecuencias legales.

“El anuncio de ayer es una estafa” ha resumido Robles. “Lo es económicamente porque pudiendo hacer una obra con fondos europeos apuesta por otra que implícitamente los rechaza; pero principalmente porque la alcaldesa ya tenía decidido no cerrar el túnel cuando su gobierno anunció lo contrario hace meses, tiempo en el que solo se han dedicado a fabricar una excusa”.

Más tráfico, más ruido, más contaminación

Una única diapositiva comparando el tráfico que circulaba por Pérez Galdós en 2019 con el que había en la misma avenida en 2023 con un carril menos por sentido, evidenciando la evaporación de casi 20.000 vehículos al día, ha servido a Giuseppe Grezzi para tirar por tierra todos los argumentos falaces del concejal Carbonell y el gobierno del PP de la necesidad de mantener el túnel abierto y el tráfico existente en Pérez Galdós.

“La senda estaba marcada y el modelo que en Movilidad Sostenible pactamos con los vecinos ya en 2017, con un carril por sentido para el tráfico privado, más los carriles exclusivos para transporte público y el carril bici sigue siendo posible”, ha apuntado Grezzi. Pero frente a ello “Catalá se aferra a mantener abierto el túnel y a sumarle cuatro carriles de tráfico privado, sin reservar ninguno para el transporte público”. Las consecuencias de esto no se le escapan a nadie, añade Grezzi: “más tráfico por el efecto llamada, peor transporte público, más contaminación y más ruido”.

Con estos efectos, como ha señalado el extitular de Movilidad Sostenible, “el concejal de Tráfico se puede poner como quiera, pero se incumple claramente con la Convocatoria de ayudas Pla NextGenerationEU de Transformación, Recuperación y Resiliencia. Concretamente con el Componente 1, que tiene como objetivo textualmente, “impulsar la descarbonización de la movilidad urbana, la mejora de la calidad del aire y de la calidad de vida”; y debiendo “las actuaciones financiadas con cargo a este programa contribuir a los objetivos climáticos de la Unión Europea al menos con un coeficiente climático de un 40%”. Recibir financiación para un proyecto que no tiene ninguna intención de reducir el tráfico a cargo de los fondos de un programa para ‘medidas de calidad del aire y reducción del ruido’ es —anticipa Grezzi— “materialmente imposible, por mucho que Català, Carbonell y Giner insistan en mentir a la ciudadanía”.

“Ni pacificación del tráfico, ni descarbonización de la ciudad, ni participación de la ciudadanía, ni renaturalización urbana”, ha resumido Grezzi, antes de que Robles anunciara que, dada la gravedad de los hechos, Compromís llevará de nuevo el asunto al pleno dando una nueva oportunidad a la corporación para frenar este retroceso y este ataque a las políticas verdes que nos aleja de Europa en pleno año de la Capitalidad Verde Europea. “Alguien tiene que poner freno a esta vergüenza de gobierno que no merecemos los valencianos” ha concluido la portavoz.