Compromís denuncia que el gobierno de Catalá lance una nota de prensa llena de equívocos para tratar de evitar de reconocer abiertamente que incumple la ley al no contar en la actualidad con ninguna Zona de Bajas Emisiones (ZBE) en funcionamiento.

En la actualidad el Ayuntamiento de València no tiene operativa una sola de las 278 cámaras adquiridas en 2022 para controlar su futura ZBE. Así lo ha confesado implícitamente el concejal Carbonell esta mañana mediante una nota de prensa con la que ha querido anticiparse al impacto de la revelación de esa misma información a preguntas del concejal Giuseppe Grezzi de Compromís. En ella el actual titular de Tráfico y Policía, reconoce que a día de hoy el Ayuntamiento solo ha instalado 33 dispositivos de los 278 y que ninguno está operativo (“podrán grabar”). De hecho, admite implícitamente, ni siquiera la plataforma de control de la ZBE está en funcionamiento (“se desarrollan dentro de lo previsto las pruebas de la que será la plataforma”) a pesar de que el plazo máximo de puesta en marcha dado por el ministerio era el pasado 1 de julio.

Eso no obstante, no es óbice para que Carbonell —se desconoce si con el ánimo de engañar a alguien que desconozca los plazos de la ‘Ley 7/2021, de 20 de mayo, de cambio climático y transición energética’—asegure en la nota que el gobierno de Catalá quiere “cumplir con todos los plazos […] porque nuestro compromiso no admite demoras, pese a estar incumpliéndolos flagrantemente.

“Es gravísimo. Y estas notas de prensa, llenas de medias verdades y falsedades rotundas son la viva prueba de que en el propio gobierno de Catalá son conscientes de ello. Catalá y Carbonell están incumpliendo la ley, no tienen los equipos instalados pese a disponer de ellos desde hace años, ni una ordenanza de ZBE en vigor, y se debe más a la vagancia e inoperatividad que caracteriza a su gestión que al negacionismo climático del que hacen gala”, apunta el concejal de Compromís Giuseppe Grezzi.

“En la bondad o maldad de sus políticas contaminantes puede haber discrepancia de opiniones, pero en lo que no cabe discusión es en que en el equipo de Catalá son vagos o descuidados; o ambas cosas”, añade el que fuera titular de Movilidad Sostenible en las dos pasadas legislaturas del gobierno de Joan Ribó y que marcaron un descenso constante e ininterrumpido del tráfico en la ciudad, tendencia truncada con el regreso de la ultraderecha al gobierno municipal.