Con València atravesando un episodio de alta contaminación, el que fuera concejal de Movilidad Sostenible y Calidad Ambiental, Giuseppe Grezzi, insta al gobierno municipal a que no se refugie en la fatalidad y retome las medidas que están en la mano de las diferentes áreas municipales para paliar la contaminación.
“El gobierno de Catalá tiene que cambiar de rumbo: tienen que abordar la calidad del aire de forma seria, para la protección de la salud de las personas, volviendo a las medidas de reducción del tráfico que han tenido tanto de éxito en nuestra ciudad”, apunta Grezzi, que considera —como la formación valencianista— que el bipartito de ultraderecha que gobierna la ciudad “se está excusando en las consecuencias derivadas de una catástrofe climática para justificar la situación actual y evitar tomar medidas para paliarla”.
De hecho, incide, “no solo son necesarias medidas para minimizar sus efectos mientras sucede el episodio, sino también que las variables que dependen de las políticas municipales como el tráfico, las masas de verde urbano, y demás, se dirijan de manera continuada en la dirección de reducir la contaminación. Y por desgracia Catalá hasta ahora ha orientado sus acciones en el sentido contrario: recortando los proyectos verdes y planteando incrementar el tráfico introduciendo nuevas avenidas en el centro de la ciudad en lugar de parques”.
Por ese motivo, Compromís exige que Catalá rectifique e introduzca medidas “para que esto no vuelva a pasar o tenga un impacto mínimo: reducción del tráfico, potenciar el transporte público, favorecer el aparcamiento residencial en la ciudad, y recuperar los proyectos de naturalización planteados por el gobierno de Compromís que está descartando, con la consecuente reducción de zonas verdes previstas por el anterior gobierno para absorber parte de la contaminación y el CO₂ generados”.
Del mismo modo, Grezzi, también ha trasladado la mano tendida de su formación para revisar los protocolos de en episodios de contaminación, pues —apunta— “como desgraciadamente estamos experimentando, la calidad ambiental y los fenómenos atmosféricos no ofrecen una foto fija, sino que las circunstancias van cambiando y hay que adaptarse a ellas, también los protocolos”.