El regidor de Compromís Ferran Puchades ha denunciado que el Ayuntamiento de València “ha incumplido la orden judicial de reincorporar a un funcionario de carrera del Servicio de Cultura Festiva al haberlo hecho en un lugar diferente al que ocupaba cuando fue cesado”. En ese sentido, Puchades ha considerado esta decisión del gobierno de Catalá “una burla a la Justicia y una demostración que su cese fue una purga política”.

Ferran Puchades ha recordado que “el gobierno de María José Catalá echó en la calle a dos funcionarios de carrera por que los molestaban ideológicamente después de que el propio regidor de Fiestas, Santiago Ballester, los amenazara a los medios de comunicación. Esa decisión sectaria ha acabado en los tribunales que han acordado la adopción de medidas cautelares ordenando la suspensión de aquel cese y, por lo tanto, la reincorporación al puesto de trabajo del que fue cesado”, ha indicado.

Para el regidor valencianista “Catalá ha decidido reinterpretar a la Justicia y ha acordado reincorporarlo a un puesto de trabajo diferente, con responsabilidades y condiciones laborales diferentes en lugar de cumplir de manera literal y adecuada la resolución judicial, arrogándose una competencia que ni tiene, ni se le ha otorgado por el juzgado. Además, lo ha hecho 17 días después de recibir la orden del juzgado que deja la ejecución tenía que ser inmediata”.

La negativa de Catalá de acatar cumplidamente la resolución judicial que le exige devolver al funcionario a la dirección de los tres museos festivos de la ciudad “es una prueba más de que estamos ante una inédita purga política”. Puchades ha recordado que: “si Catalá prefiere dejar estos museos sin director antes que cumplir el mandato judicial es porque la intencionalidad no era más que la de purgar personas concretas de entre los trabajadores públicos.”

Ferran Puchades ha recordado que “desde Compromís le exigimos, no con solo que rectifico el acuerdo de la Junta de Gobierno del pasado viernes para incumplir la resolución judicial, sino también para evitar futuros varapalos judiciales y readmitir de manera inmediata y definitiva, a los dos funcionarios purgados.”

Finalmente, el regidor valencianista ha manifestado que “los gobiernos pasan pero la administración pública permanece y tiene que ser neutral, los trabajadores públicos tienen sus lugares ganados por concurso público y no pueden ser víctimas del sectarismo político. Con esta declarada purga y persecución, los protagonistas podrían estar entrando en el terreno de la prevaricación y es urgente que vuelvan al terreno de la exquisita legalidad.”