Giuseppe Grezzi recuerda que, por primera vez en décadas con la única excepción de la pandemia del Covid, las playas del cap i casal han empezado junio sin servicio de sombrillas, y tumbonas, después de que el PP haya llegado tarde a hacer su primera adjudicación de la legislatura.
De mediados de abril hasta prácticamente noviembre. Ese es el arco de tiempo en el que, al menos durante los años de gobierno de Compromís, las empresas ganadoras de la concesión para ofrecer los servicios de sombrillas y tumbonas en las playas de la ciudad de València han venido funcionando en la ciudad. Sin embargo, después de unas pascuas y una temporada preestival sin oferta, ayer domingo 1 de junio, las playas de la ciudad inauguraban oficialmente la temporada todavía careciendo de este servicio. ¿La responsable? La concejalía de Playas y su titular, la concejala Mónica Gil, bajo cuya supervisión han pasado los meses sin que el necesario concurso para la prestación del servicio se haya realizado en tiempo y forma.
“Hay que reconocer que en 2020, en medio de la pandemia mundial del Covid y tras esperar las instrucciones pertinetes, el servicio de tumbonas y sombrillas en las playas de València no se pudo estrenar hasta el 6 de junio”, apunta Giuseppe Grezzi, que tuvo que lidiar entonces con aquel reto y cuya gestión el servicio siempre estuvo a tiempo. “Sin embargo, lo normal si Catalá encabezara un gobierno que trabaja, sería que este año este servicio también se estuviera ofreciendo en tiempo y forma. Por desgracia València también padece ahora otra pandemia, la de la extrema derecha en muchos gobiernos y esta es otra de las consecuencias”, añade el concejal valencianista.
Desde Compromís lamentan que esta falta de previsión por parte del equipo de gobierno afecte no solo a la imagen turística de València, sino especialmente a la comodidad de los vecinos y visitantes que acuden a las playas en busca de descanso. “Tras dos legislaturas de una gestión impecable, València no puede permitirse volver a normalizar la dejadez en sus funciones de la extrema derecha. Hoy es esta gestión, que puede parecer anecdótica, pero antes fue la de la reacción a la Dana del 29O, y está en sus manos cada día la trasformación posterior a aquella catástrofe. Y no paran de dar signos de que su implicación es la misma”, concluye Grezzi, quien también ha recordado que los retrasos administrativos y la falta de planificación comienzan a ser una constante en la nueva etapa del gobierno municipal.