- El objetivo es alcanzar los 10.000 apoyos, los mismos que se necesitan para impulsar una ILP
- “Cada día son más las familias expulsadas de sus barrios mientras Catalá guarda en un cajón las soluciones ya aprobadas”, denuncia la portavoz Papi Robles
Compromís per València ha presentado hoy la segunda fase de la campaña “Que no te tiren”, una iniciativa que tiene como objetivo “denunciar la grave situación de la vivienda en la ciudad y movilizar a la ciudadanía para exigir soluciones reales ante la pasividad del gobierno de María José Catalá”, ha explicado la portavoz, Papi Robles. “Salimos a la calle con una campaña de recogida de firmas porque consideramos que la situación es muy grave y las soluciones tienen que aplicarse ahora, no dentro de unos años cuando ya esté todo perdido”, ha señalado la concejala valencianista.

“Hace un año empezamos con esta campaña y la respuesta de la gente fue alentadora: conseguimos destapar más de 4.000 apartamentos turísticos ilegales. Hoy damos un paso más porque el problema de la vivienda no solo es una realidad, es un clamor social”, ha explicado la portavoz de Compromís.
Según la edil valencianista, la situación se ha agravado en los últimos meses: “Tenemos jóvenes que no pueden emanciparse, familias que viven con miedo a las subidas del alquiler y vecinos expulsados de sus barrios por la presión turística. Solo en el último trimestre de 2024, 3.000 personas fueron expulsadas de València. Si la tendencia continúa, estaremos hablando de 12.000 al año. Es el mayor cambio demográfico de la ciudad en décadas, pero ahora la población no crece, sino que se sustituye por perfiles de alto poder adquisitivo”.
Una recogida de firmas para forzar a actuar
Esta nueva fase de la campaña consistirá en una recogida de firmas, con el objetivo de llegar a 10.000 apoyos, la misma cifra necesaria para impulsar una Iniciativa Legislativa Popular en Les Corts Valencianes.
Las firmas se podrán recoger a través de la web quenotetiren.com y en más de 20 puntos de la ciudad, donde Compromís instalará mesas en los barrios hasta el mes de diciembre. “Lo que pedimos es muy sencillo: aplicar la declaración de ciudad tensionada que ya aprobó el Ayuntamiento con Joan Ribó, para poder topar los precios del alquiler. Una medida que ya han aplicado ciudades como Barcelona o Pamplona y que Catalá se niega a aplicar, porque está más preocupada en atraer nómadas digitales ricos que en defender a las familias que llevan toda la vida viviendo aquí”, ha señalado Robles.
Una ciudad que expulsa a sus vecinos y vecinas
La portavoz de Compromís ha denunciado que la alcaldesa “está permitiendo que València se convierta en un decorado turístico, con precios solo para ricos y con el vecindario expulsado a las áreas metropolitanas mal conectadas. Este es el modelo neoliberal del PP, el mismo que están aplicando en Madrid y ahora quieren exportar a València”.
“Catalá tiene en un cajón la última medida que aprobó el gobierno de Ribó, y mientras guarda las soluciones ya aprobadas, cada día más familias se ven obligadas a abandonar su ciudad. Nosotras no nos resignamos. Somos la voz de la mayoría social que quiere regular los precios del alquiler, que quiere que València siga siendo su casa”, ha concluido Robles.