- La portavoz de Compromís exige explicaciones en el Consejo de Administración de la empresa pública ante la negligente gestión del concejal de Catalá, que debe reclamar por vía judicial 40 millones a la ATMV
La portavoz de Compromís per València, Papi Robles, ha denunciado hoy que la ciudad “está pagando una factura altísima por la gestión desastrosa del concejal Jesús Carbonell”, y ha cifrado en casi 200 millones de euros el agujero económico acumulado entre el fracaso de la Zona de Bajas Emisiones y el litigio abierto entre la EMT y la ATMV. “Entre los 155 millones en riesgo por la incapacidad de aprobar la ZBE y los casi 40 millones que ahora se reclaman a la Generalitat, la incompetencia de Carbonell ya tiene un coste insostenible para la ciudad”, ha afirmado.
Robles exige hoy explicaciones en el Consejo de Administración de la EMT, donde el gobierno de Catalá lleva la aprobación de un contencioso administrativo para reclamar a la ATMV los 40 millones de las tarjetas SUMA. “Es incomprensible: EMT y ATMV están gobernadas por el PP. ¿Cómo es posible que dirigentes del mismo partido sean incapaces de ponerse de acuerdo y tengan a València inmersa en un litigio millonario? Es la prueba evidente de un gobierno fracturado y sin dirección”.

Según la portavoz, la situación económica de la EMT es “extremadamente grave”: la empresa municipal ha tenido que solicitar pólizas de crédito para pagar nóminas y combustible, debido a la falta de ingresos compensatorios por parte de la ATMV. “Un servicio esencial como el transporte público no puede depender de las peleas internas del PP. Esto es un auténtico despropósito”. En el Consejo de Administración que se celebra hoy, el gobierno de Catalá prevé aprobar la presentación de un contencioso ante el TSJ para reclamar los 40 millones. Para Robles, “es inaudito que el PP lleve a los tribunales al PP. No es un conflicto institucional: es una guerra interna que están pagando los valencianos”.
Compromís también alerta de que la reclamación a la ATMV solo llega hasta mayo de 2025: “¿Qué pasa con la deuda acumulada desde entonces? ¿De cuánto dinero estamos hablando realmente? El gobierno de Catalá no está siendo transparente, y eso es especialmente grave cuando se trata de fondos públicos y de un servicio esencial”.
Robles recuerda que Compromís ya pidió la dimisión de Carbonell “por su absoluta falta de capacidad”. “Todo lo que toca acaba mal: la ZBE, el caos en la movilidad, la EMT… Catalá sigue protegiendo a un concejal que solo genera problemas y que está poniendo en riesgo la sostenibilidad económica del transporte público y de toda el área de movilidad de la ciudad”.
“La ciudad no puede seguir gobernada por un equipo que convierte cada competencia en un agujero económico y cada decisión en un problema”, ha afirmado Robles. “València merece un gobierno serio, responsable y capaz de gestionar, no esta sucesión de despropósitos que siempre pagan los mismos: los vecinos y vecinas”.