La concejala Lluïsa Notario destaca que “Benimàmet-Beniferri representa el mayor fracaso del proceso en el que únicamente ha participado un 0,72 por ciento del vecindario” y acusa a Catalá de realizar “un simulacro de proceso participativo en las pedanías de València que ha sido una estafa a la ciudadanía desde el principio, con unos proyectos elegidos en un despacho por el PP, donde el vecindario no ha podido decidir ni opinar ni debatir sobre sus necesidades y con un gasto de 33.333 euros por pueblo”.
La concejala de Compromís per València Lluïsa Notario califica este proceso como “una operación de maquillaje que ha puesto en marcha el PP que necesita justificar que hace cosas en el año de la Capital Verde Europea, como el anuncio estrafalario de hace unos días vinculando la capital verde y el certamen internacional de bandas”. Según Notario, “el gobierno municipal se ha sacado de la cesta un simulacro de proceso participativo en el que le han propuesto al vecindario de los pueblos votar sobre tres proyectos impuestos entre los que algunos de ellos son para mejorar edificios municipales o hacer infraestructuras que no tienen ninguna relación con la capitalidad verde y que, por tanto, deberían ser impulsados desde los servicios correspondientes con presupuesto propio como la adecuación de un terreno municipal, pasos de peatones o mejoras en los edificios de las alcaldías.”
Lluïsa Notario explica que los pueblos de València, pedanías según el gobierno del PP, tienen una población total con derecho a voto de 39.470 personas (según los datos de padrón de 2023 publicados por la Oficina de Estadística). “De este censo sólo votaron 1.452 en esta imitación de proceso participativo, que supone un 3,68 por ciento. Los casos más paradigmáticos son Benimàmet-Beniferri donde sólo han votado 91 personas de una población de 12.609 personas o La Punta donde han participado 38 personas sobre un total de 2.499 y supone un 1,52 por ciento”.
Según la concejala valencianista, “después de un año el PP ha dejado claro que su modelo de gobierno es la foto y el postureo. Ni le importan los pueblos, ni el bienestar del vecindario, ni el medioambiente ni mucho menos la participación del vecindario. Aún no han puesto en marcha los procesos participativos y llevan más de un año gobernando”. Lluïsa Notario recuerda que “hace unos meses le hicimos al PP una propuesta para impulsar un proceso participativo similar al Decidim para que el vecindario de cada barrio y pueblo de València pudiera proponer, debatir y decidir qué necesitan para mejorar su calidad de vida y a su alrededor, propuesta que fue rechazada por el gobierno municipal.”