El concejal valencianista Pere Fuset denuncia que “Catalá se ha acostumbrado a esconder información, expedientes y contratos, especialmente de la concejalía de Fiestas y Tradiciones, donde se han multiplicado los contratos a dedo generando un mayor coste para las arcas públicas”.

El Síndic de Greuges ha dado nuevamente la razón en Compromís per València y ha forzado a la alcaldesa de València, María José Catalá, a dar acceso a los contratos del Servicio de Fiestas a raíz de una queja formulada por el regidor Pere Fuset. Una información que, como señala Fuset, “es imprescindible para que la oposición podemos hacer el trabajo de fiscalización y control al gobierno para evitar la corrupción en las instituciones”.

Fuset apunta que los dos concejales de Fiestas de Catalá “son los regidores que más quejas acumulan por falta de transparencia y prácticas cuestionables” y señala que, en su resolución, el Sindic considera que el Ayuntamiento de València tiene que permitir el acceso a los documentos finalizados que forman parte de expedientes en tramitación y que tiene que indicar, respecto a la información o los documentos en elaboración, la fecha estimada en que esta estará finalizada.

La queja de Compromís per València llega después de las reiteradas negativas de los concejales Mónica Gil y Santiago Ballester, de Vox y PP respectivamente, a dar acceso a expedientes de contratación alegando que “todavía no estaban finalizados”.

El regidor valencianista critica que “el gobierno de María José Catalá ha cogido la costumbre de esconder expedientes y contratos por sistema, especialmente del área de fiestas. Una práctica antidemocrática que combinan con la hipocresía y la mala gestión puesto que PP y Vox han pasado de denunciar el que llamaban “contratos a dedo” a multiplicarlos disparando los costes para el erario público”.

El regidor valencianista pone como ejemplo los contratos de la Gran Fira de València a la cual Catalá, a pesar de la reducción de actividades, dedicó más de 1,5 millones de euros con un 81% de contratos a dedo.

Fuset ha explicado que “a pesar de que desde el gobierno nos ha negado indebidamente el acceso a la información como ahora reconoce el Síndico, hemos podido identificar 1.425.000 euros en contratos que tenemos detectados, a los cuales habría que sumar otros que todavía no se han facilitado. En total estamos hablando de más de 1,5 millones de euros, una cantidad que es superior al presupuesto que el Ayuntamiento dedica a las Fallas en el mes de marzo. Y de esos 1,5 millones, solo 275.000 euros han sido licitados en procesos de libre concurrencia, el 19% del total del coste”.

Como señala el regidor, “la suma de los contratos menores y los contratos artísticos -por los cuales el PP denunciaba penalmente al anterior gobierno- así como los negociados sin publicidad y los contratos de urgencia aumentan a 1.163.000 euros, de forma que el 81% del coste de la Gran Fira de València ha sido a dedo”.