·  Un año después de empezar la restauración de la escultura ubicada en la Glorieta ni la escultura está restaurada ni tampoco realizada la réplica de la misma para ocupar su lugar original.

· La escultura del tritón de Ponzanelli, una de las de mayor valor artístico de la ciudad, fue objeto de trabajos de restauración iniciados en 2023.

Como denuncia la portavoz adjunta de Compromís València, Gloria Tello, “la cuestión es que hace un año empezó esta intervención y la supuesta fabricación de una réplica de la misma para continuar ubicada en la Glorieta, a pesar de que por ahora la escultura continúa sin estar a su ubicación y ninguna señal indica ni la intervención que se está realizando, ni los plazos previstos. Un tiempo excesivo que es síntoma del mal trabajo y carencia de interés por nuestro patrimonio histórico y artístico del actual equipo de gobierno de Catalá”.

La extitular de Cultura del Ayuntamiento de València ha explicado que “desde el último gobierno municipal de Compromís impulsamos la intervención de rehabilitación de la escultura, puesto que el paso del tiempo había provocado que fuera necesaria. Aun así, a pesar de haberse iniciado los trabajos en 2023, estos se encuentran en punto muerto: ni han finalizado ni la réplica de la escultura ha vuelto a su ubicación original”.

La actual desidia contrasta con el trabajo persistente y constando de los últimos gobiernos municipales en la restauración del patrimonio histórico y artístico y, incluso, de estas esculturas. Las de Ponzanelli han sido objeto de especial cura durante el pasado mandato de los gobiernos de Compromís. De hecho, el Ayuntamiento de València a través de la Concejalía de Cultura en manos de la actual coportavoz Gloria Tello impulsó la restauración de cuatro esculturas del artista tardobarroco. Una acción que se enmarca dentro del Pla de Restauración del Patrimonio que se llevó a cabo entre 2015 y 2023, con un extenso trabajo de rehabilitación y restauración de elementos del patrimonio histórico y artístico de nuestra ciudad, con más de 1.000 elementos.

Las esculturas del artista italiano Giacomo Antonio Ponzanelli (Carrara 1654 – Génova 1735) para decorar la desaparecida Alquería de Pontons, construida a finales del siglo XVIII a Patraix, que debe su nombre a quien fuera su propietario, el canónigo de la catedral de València Antonio Pontons. Las obras pasaron a ser propiedad municipal cuando se quemó la casa del eclesiástico, se instalaron en la Glorieta el 1818. Por otro lado, el Ayuntamiento elaboró réplicas de las esculturas de Diana, Venus, Plutón y Apolo y fueron instaladas en el jardín de Tres Forques en 2018, cumpliendo con una reivindicación histórica de los vecinos y vecinas del barrio, para considerarlo un símbolo del patrimonio antiguo de su distrito.