• Papi Robles presenta el plan de la formación valencianista para recuperar València ante las tres grandes emergencias: vivienda, cambio climático y crisis social
  • La portavoz de Compromís denuncia que cada trimestre “unas 3.000 personas se ven obligadas a abandonar València por no poder pagar un alquiler o comprar una vivienda”

La portavoz de Compromís per València, Papi Robles, ha convertido su intervención en el Debate del Estado de la Ciudad en una llamada a la acción ante las “grandes emergencias” que vive València: la crisis de la vivienda, la emergencia climática y la crisis social. Robles ha denunciado que la ciudad está “paralizada y sin rumbo por culpa de una alcaldesa inútil y tramposa, y de un gobierno sometido a Vox y marcado por la corrupción”, y ha defendido un conjunto de medidas concretas para recuperar València a partir de 2027.

En materia de vivienda, la portavoz ha recordado que cada trimestre “unas 3.000 personas se ven obligadas a abandonar València por no poder pagar un alquiler o comprar una vivienda”. Ha calificado esta situación de “insostenible y sin precedentes” y ha remarcado que las 1.000 viviendas prometidas por Catalá “no solucionan nada”.

Ante esto, Compromís ha propuesto un paquete de medidas valientes que incluye la regulación de los precios del alquiler, la prohibición de los apartamentos turísticos, una mayor inversión en vivienda pública y la movilización de la vivienda vacía mediante un canon específico.

Robles ha situado también la emergencia climática en el centro del debate. “Hace más calor, durante más tiempo y con fenómenos extremos cada vez más recurrentes. València había abierto un camino con políticas verdes que nos hicieron ganar el galardón de Capital Verde Europea, pero con el gobierno actual este reconocimiento ha pasado sin pena ni gloria”, ha lamentado.

Para revertirlo, Compromís ha anunciado el lanzamiento de un plan ambicioso que contempla la plantación de 100.000 árboles, el aumento en un 50% de las zonas verdes y la creación de bosques urbanos y refugios climáticos en todos los barrios de la ciudad.

Operació Retorn

En cuanto a la emergencia social, Robles ha asegurado que “los valencianos y valencianas viven peor ahora que hace dos años”, y ha acusado a Catalá de beneficiar a los ricos con una rebaja masiva del IBI mientras las familias y autónomos “pagan más por el impuesto de residuos, por la tasa Tamer, por el ICIO e incluso por coger el autobús”. También ha denunciado el colapso de los servicios sociales y el impacto del turismo descontrolado, que “ensucia la ciudad, provoca ruido, colapsa el transporte público y gentrifica los barrios”.

Ante ello, Compromís ha anunciado el plan “Recuperem València – Operació Retorn”, que incluye una tasa turística, la limitación de entrada de cruceros en el puerto, un IBI más justo que alivie a las familias trabajadoras, 10 millones de euros en ayudas al comercio de barrio y a los jóvenes emprendedores, y una inversión histórica en servicios sociales.

La portavoz ha ampliado su discurso a otros ámbitos, alertando también de la existencia de una emergencia democrática, con este debate convocado con poco más de dos días de antelación; una emergencia urbanística, con planes pensados para los constructores y no para el vecindario; una emergencia humanitaria, ante la cual València debe ser “polo de dignidad” como lo fue con la crisis del Aquarius; y una emergencia feminista, que sitúa la igualdad y los cuidados en el centro de las políticas públicas.

Robles ha concluido con un mensaje directo a la alcaldesa: “Catalá lleva dos años haciendo ‘pensaetes’, dos años perdidos para València. Le recomiendo que aproveche los dos años que le quedan para pensar qué hará en 2027, porque en ese año la gente que queremos vivir en València, que queremos más derechos, más aire limpio y una ciudad más verde y habitable, recuperaremos València”.