Compromís presentará una moción para que el Ayuntamiento ayude a los pequeños comercios a hacer frente a la actualización de los alquileres que dictamina el “decreto Boyer”.
El portavoz de la formación, Joan Ribó, afirma que “es la única manera de evitar la desaparición de decenas de establecimientos que durante décadas han dado vida a muchos barrios de la ciudad, especialmente a los distritos centrales”.
La actualización de precios de los alquileres de renta antigua se hará efectiva a partir del 1 de enero próximo; esto hace peligrar multitud de pequeños comercios tradicionales, tal y como denuncian las asociaciones que los agrupan. Por eso, desde Compromís, se insta a la administración local a actuar con premura para evitar su desaparición.
El portavoz de la formación, Joan Ribó, presentará una moción a la Comisión de Hacienda del consistorio para que “en el plazo de un mes el equipo de gobierno concrete una serie de propuestas para ayudar y facilitar la transición de los comercios antiguos a las nuevas condiciones contractuales. Una iniciativa que tiene que contar con la participación de los afectados, que tienen derecho a expresar posibles estrategias de viabilidad. Si no lo hacemos así, decenas de comercios de toda la vida podrían desaparecer en breve, y ya sabemos lo que eso significa: deterioro de los barrios y un mayor empobrecimiento económico de la población”. Esta situación afecta prácticamente a toda la ciudad, pero especialmente a los barrios situados en los distritos centrales de Valencia.
Desde Compromís recuerdan que otras ciudades españolas ya han puesto en marcha planes que evitan el desmantelamiento del comercio tradicional. Así, se propone estudiar posibles ayudas a los comerciantes de pequeñas tiendas, vigilar los precios del alquiler para que no se cometan abusos, mecanismos que faciliten la continuidad de la actividad comercial, y posibles beneficios fiscales de ámbito municipal. Para Joan Ribó, “hay que tener en cuenta que el comercio local es también un dinamizador de otras industrias muy importantes para la ciudad, como las de carácter cultural y turístico, y también son un patrimonio a cuidar y respetar; esperamos que el Ayuntamiento de Valencia se decida a hacerlo”.
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