El Ayuntamiento de València ha comenzado a renovar el alumbrado de la calle de San Vicente. Lo hace a través de la Concejalía de Gobierno Interior y a partir de dos procesos de participación ciudadana para decidir en qué se tenía que invertir parte de los presupuestos participativos para este año. Se trata de una intervención reclamada por vecinos y vecinas de la ciudad durante muchos años.
La actuación municipal comprende dos tramos de la calle de San Vicente, el que une Giorgeta con la Cruz Cubierta y Tomás de Villarroya y el que va desde Giorgeta hasta la plaza de España. Sendos proyectos han sido explicados personalmente por Sergi Campillo, a representantes vecinales que durante muchos años habían reclamado al consistorio una actuación como la que ahora se ha iniciado, dado el estado de deterioro y abandono de las instalaciones del alumbrado y de su ineficiencia. De hecho, fueron dos proyectos seleccionados por el vecindario en los procesos participativos establecidos por el Govern de la Nau para que la ciudadanía decidiera a qué se destinarían este año hasta siete millones de euros de presupuestos participativos.
“Una vez más, escuchamos a los vecinos y vecinas de la ciudad. A todas y a todos. A los que están más cerca del centro y a los que viven en zonas periféricas de la ciudad. Les escuchamos por fin, después de muchos años reclamando servicios y equipamientos públicos necesarios para hacer la vida más sencilla y cómoda en diversas zonas de la ciudad”, ha destacado Campillo, para quien estas actuaciones “demuestran también de nuevo el compromiso del Govern de la Nau con la sostenibilidad y la eficiencia energética. Damos luz a las zonas donde faltaba y quitamos el exceso de iluminación de otras zonas. Todo, con criterios de eficiencia que nos permitirán una iluminación mucho mejor con unos gastos económico y energético inferiores”.
En el tramo de la calle de San Vicente que va desde Giorgeta hasta la Cruz Cubierta y Tomás de Villarroya se están sustituyendo 71 báculos de carretera por columnas de fundición. También se cambian 72 luminarias obsoletas de lámparas de sodio de 400 vatios por 124 de LED de 100 vatios de última generación. Además, se sustituyen 19 luminarias obsoletas de fachada por otras viales y farolas de última generación.
Toda la actuación tiene un presupuesto final para este tramo de 275.538,79 euros.