Un proyecto de innovación que desarrolla la Universitat Politècnica de València para introducir nuevos materiales, más sostenibles, en los monumentos falleros y, al mismo tiempo solucionar el problema medioambiental que supone la quema de la paja del arroz ha recibido el apoyo del alcalde Joan Ribó quién, al reunirse con los investigadores, hoy se ha comprometido a buscar recursos para que estos puedan continuar con su trabajo.
Joan Ribó ha visitado la Facultad de Bellas artes, en la Universitat de València, acompañado del concejal de Cultura Festiva, Pere Fuset, y del concejal de Conservación de Áreas Naturales y Devesa-Albufera, Sergi Campillo, para conocer de primera mano el mencionado proyecto que pretende introducir las nuevas tecnologías en la elaboración de las fallas.
“Nosotros estamos trabajando también para garantizar la salud laboral de los artistas falleros, para que la combustión de las fallas sea más limpia, y para solucionar problemas de contaminación medioambiental, y el proyecto de la Universidad Politécnica es muy interesante”, ha manifestado Joan Ribó, quien esta misma semana también se reunirá con el director del CSIC en Valencia, para tratar de asuntos similares.
Pere Fuset, que ha agradecido la implicación de los investigadores de la Universidad Politécnica, ha asegurado los avances de este proyecto, la evolución del cual ha seguido “con interés”. Por lo que respeta a su aplicación, ha anunciado que en la próxima falla municipal se podrá encontrar, si da tiempo, alguna pieza hecha con los nuevos materiales que investigan en la Politécnica.
“Mi deseo es que el proyecto sea un éxito y que en un futuro, no muy lejano, la Falla de la plaza del Ayuntamiento sea un ejemplo de vanguardia también en los materiales, que no supongan un riesgo para la salud de los artistas falleros y permitan una combustión más limpia y espectacular, y que la declaración de las Fallas como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad sea un estímulo para los investigadores”, ha concluido.