Ribó: «El presupuesto municipal contempla unas transferencias del Estado en el Fondo Complementario de Financiación (FCF) de 300’54 millones, lo que supone respecto año un crecimiento del 25’4%, 59’5 millones de euros de más que en 2012»
El portavoz del Grupo Municipal Compromís, Joan Ribó, ha criticado duramente los Presupuestos Municipales para el año 2013 por entender que vienen lastrados por tres aspectos fundamentales: «la elevada deuda del ayuntamiento, la política de recortes que impone el gobierno de Rajoy y la renuncia del equipo de Rita Barberá de obtener recursos a partir de imposiciones a aquellos que más tienen como son los bancos y entidades financieras y los sectores con más dinero de la sociedad «. El resultado es, por tanto, nefasto. Según Ribó, «congelación y recortes de los recursos dedicados a servicios básicos y prácticamente nula inversión nueva en la ciudad».

En este sentido, el presupuesto dedica 120 millones de euros a pagar deuda, 41’4 millones para intereses y 78’7 para amortizaciones de capital. «Supone el 16’4% del total del presupuesto». Si todo funciona como es debido, a finales de 2013, tendremos una deuda de 875’4 millones de euros que supone un 122’65% de deuda. Un porcentaje escandaloso que refleja claramente que la deuda continuará estrangulando Valencia durante muchos años debido a los excesos realizados por el gobierno del PP en los años anteriores, según ha señalado Ribó.

En el capítulo de ingresos llaman la atención dos aspectos. En primer lugar, la renuncia del gobierno de la Sra. Barberá aplicar tasas o impuestos a aquellos que más tienen: Así se renuncia a aplicar una tasa a los bancos y entidades financieras para la instalación de cajeros automáticos en la calle como hacen muchos ayuntamientos de todos los colores en España. Con esta tasa se hubiera podido obtener alrededor de 170.000 euros, mucho más que muchas otras tasas actualmente vigentes. Nos parece incomprensible que se tenga miedo o pereza de aplicar esta tasa precisamente los bancos, los primeros responsables de la crisis que padecemos, en palabras del portavoz de Compromís.

Por otra parte, según Joan Ribó, «el presupuesto contiene datos difícilmente explicables. Así contempla unas transferencias del Estado en el Fondo Complementario de Financiación (FCF) de 300’54 millones de euros, cantidad que supone respecto a este año un crecimiento del 25’4%, 59’5 millones de euros de más que en 2012. Esta fecha es precisamente la que hace crecer el presupuesto de este año de forma significativa. Pero es sólo una suposición que no está apoyada en un crecimiento similar de ninguna partida de los presupuestos generales del estado y que, por tanto, presumiblemente no se va a cumplir. En consecuencia, el crecimiento de los ingresos respecto a 2012 de15’5 millones de euros es fruto de una suposición no fundada en una fecha los PGE actualmente en fase de discusión. Es decir, el crecimiento del 2’2% respecto al año anterior es fruto de una suposición que es más un buen deseo que una realidad.

Las consecuencias de un presupuesto restrictivo son nefastas. «Muchos de los servicios básicos se quedan con la partida congelada como es el caso de la limpieza de las calles o poda y jardinería». Hay que llamar la atención que mantener la misma cantidad que en el año 2012 supone disponer de menos recursos reales por el aumento del IVA y de la inflación (ya en el 3’6%). Por tanto, en la realidad disminuyen los recursos dedicados a estos servicios en un 7% aproximadamente. Desde Compromís nos preguntamos cómo quedará la limpieza, la poda, las plagas de ratas etc. en 2013 si con un 7% más de recursos en 2012 han sido como todos los valencianos sabemos que han sido.

Por lo que respecta a las inversiones para 2013 éstas son raquíticas: 32’25 millones de euros. Un porcentaje del 4’4% del presupuesto del que 8,7 millones se dedican a pagar un puente ya realizado (puente de Madera), 1 millón para continuar comprando casas en el Cabanyal pese a la situación jurídica, 10’6 millones para ciclo integral del agua, 3’3 millones para bomberos y emergencias. Para mejorar los servicios en los barrios prácticamente ni un duro.