Joan Ribó se ha mostrado “profundamente insatisfecho” e incluso “enfadado” por los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2017, que considera “una tomadura de pelo” a los valencianos y una “discriminación evidente y contrastable con los números en la mano”. El alcalde se ha referido específicamente a las partidas que continúan sin presupuesto por parte del gobierno central o que, incluso bajan respecto del año pasado: “No hay nada para el contrato-programa; no hay nada para el paso de Corredor Mediterráneo por la ciudad de València ni para el soterramiento de las vías; no hay nada para la deuda del Consorcio de la Copa América; las partidas de Cultura bajan… y si comparamos a València en su conjunto con otras ciudades como Madrid, Barcelona o Sevilla, es intolerable. Si ya no teníamos gran cosa el año pasado, todavía nos lo rebajan”. Una serie de agravios que han hecho que acabara preguntándose: “¿Pero qué han hecho estos señores de PP y Ciudadanos?” al ser el Partido Popular la formación política que ostenta el gobierno central, y Ciudadanos el grupo parlamentario en el Congreso que los ha apoyado.
El alcalde de València ha trasladado varias cuestiones al Ayuntamiento de València: “Señor Fernando Giner [portavoz de Ciudadanos], ¿cómo puede aprobar Ciudadanos unos presupuestos de este tipo? Señores del Partido Popular: ¿cómo pueden venir al Pleno a aprobar demandas de más financiación y partidas a los PGE para València cuando después su propio partido presenta esto? Me parece intolerable; continúan ninguneando a los valencianos, y sobre todo a los vecinos y vecinas de esta ciudad. Otra vez el PP y ahora con el apoyo de Ciudadanos no se ha acordado de esta ciudad y de sus carencias: es una pésima noticia. Nosotros esperábamos ver alguna mejora… pero ver que nos bajan todavía 20 millones la porquería de inversiones territorializadas que teníamos el año pasado, es una burla a los valencianos”.
Hay que señalar que los PGE no contemplan ninguna partida para el paso del Corredor Mediterráneo por la ciudad de València, ni para el soterramiento de las vías: ni para el Túnel Pasando, ni para la estación definitiva: “¿De qué sirve la palabra dada por los regidores de PP y Ciudadanos en el Pleno del Ayuntamiento cuando reclaman financiación para estas cuestiones?” se ha preguntado Ribó. De hecho, los PGE contemplan “cero euros” para el contrato-programa que tendría que ayudar a financiar el transporte metropolitano de València, frente a los 126 millones de Madrid, los 108 de Barcelona (que aumenta así 10 millones más respecto al año pasado), o los 25 de Canarias, “cuando se calcula que en València le tendrían que corresponder como mínimo 40 millones de euros” ha añadido el alcalde.
La financiación del servicio de tren de cercanía para València “también es un desastre: Rajoy nos sitúa a la cola de España con un raquítico millón de euros que se atreve a reducir respecto al año pasado”, frente a los 329 millones de Madrid, los 181 de Málaga, los 175 de Asturias, los 148 de Barcelona o los 51 de Sevilla. “Es más, la alta velocidad continúa sin invertir ni un euro en la mejora de estaciones, cuando tenemos todavía pendiente la estación definitiva del Parque Central, y para el Corredor Mediterráneo destinan 2 millones, siendo una infraestructura capital para nuestra economía”.
Ribó se ha referido también al Consorcio Valencia 2007, destacando que “baja la dotación por tercer año consecutivo, pero es que además no destinan ninguna partida para el pago de la deuda de la Copa América, aquella que según el PP no nos tenía que costar ni un duro, pero que arrastra una deuda de más de 400 millones. Un acontecimiento internacional, que el gobierno central paga con las Expos de Sevilla y Zaragoza, o con las Olimpiadas de Barcelona, pero que a València le niega”.
Y si hablamos de infraestructuras culturales, “la cosa está peor que el año pasado”, ha dicho Joan Ribó. El Palacio de las Artes “continúa, con 0’6 millones de euros, a años luz de sus competidores directos que son el Teatro Real de Madrid (9’39 millones), el Teatre del Liceu de Barcelona (7’11 millones) o el Teatro de la Maestranza de Sevilla (1’68 millones)”. Lo mismo pasa con el IVAM “que con no llega a doscientos mil euros se encuentra lejos de la financiación que reciben el Reina Sofía (más de 42 millones), el Thyssen (más de 5 millones), o el MNAC (más de 2 millones) y el MACBA (más de 1 millón) de Barcelona”. La segunda pinacoteca de España, el Museo de Bellas artes San Pío Quinto de València “tampoco merece la atención del gobierno de Rajoy, que prefiere financiar otros museos”.
Joan Ribó ha criticado que la Disposición Adicional 92 de la Ley de Acompañamiento de los Presupuestos Generales del Estado sólo habla de reinvertir los remanentes de tesorería de los ayuntamientos en inversiones que no implican la contratación de personal, es decir, “nos quitan la posibilidad de fomentar la creación de ocupación, y limitan la capacidad municipal de invertir allá donde es necesario”.