Un juez de Valencia ha llamado a declarar a la exdirectora Aurora Gallego por el caso de los niños robados

Consol Castillo, regidora de Compromís: “exigimos que el equipo de gobierno del PP le quito inmediatamente el título de hija adoptiva de la ciudad a Aurora Gallego”

La concejala de Compromís en el Ayuntamiento de Valencia, Consol Castillo, y el Diputado Provincial de Compromís, Emili Altur, han exigido que estas instituciones dejen de subvencionar a la Casa Cuna Santa Isabel, implicada en el caso de los niños robados. Así la alcaldía del Ayuntamiento de Valencia tiene asignada una subvención de 6.000 € anuales y la Diputación de Valencia dentro del plan de subvenciones 20.000 € par el periodo 2011-2015.
Desde el 1991, año de llegada de Barberà a la alcaldía, el Ayuntamiento ha concedido más de 528.000 € a la Casa Cuna Santa Isabel, lo que hace una media de 20.600 € anuales. Esta cifra se ha incrementando progresivamente desde las 60.000 pesetas, 360 €, del 1991 hasta los 36.000 € del 2004.

Compromís ya denunció la concesión en 2011 del título de hija adoptiva de la ciudad a Aurora Gallego, que ya estaba acusada de graves delitos, en uno de los casos más grises de nuestra historia. En 2012 después de la demanda interpuesta por un grupo de 21 valencianos y valencianas, el tribunal resolvió que Casa Cuna Santa Isabel tenía la obligación de entregar a los solicitantes toda la documentación de sus archivos que hacen referencia a sus madres biológicas, la entidad subvencionada por el Ayuntamiento de Valencia y la Diputación viene incumpliendo de manera reiterada esta resolución judicial.

Consol Castillo, regidora de Compromís, ha declarado: “Exigimos que el equipo de gobierno del Partido Popular le quite inmediatamente la distinción de hija adoptiva de la ciudad, puesto que una acusada de robar niños no es la persona adecuada para recibir distinciones municipales.”

Emili Altur, diputado provincial de Compromís, ha afirmado: “Rus y Barberà subvencionan sistemáticamente una entidad que obstruye a la justicia. Al mismo tiempo las hijas e hijos quieren saber quién son sus padres biológicos, porque ya de adultos habían descubierto su situación de hijos adoptados. A la vez los padres y madres quieren saber si aquella criatura que tuvieron está viva, porque en la Casa Cuna Santa Isabel les habían dicho que habían muerto en el momento del parto y hubiera sido dada en adopción de forma ilegal.”