Las obras del nuevo paso de peatones, que empezaron en agosto, supone el primero de los seis aprobados en los presupuestos destinados a los proyectos de participación ciudadana. El paso está situado en la unión del paseo de la Petxina con la calle del Túria, permite el acceso directo a uno de los descensos a los jardines del antiguo cauce del río y resuelve una petición vecinal demandada en cuanto a la mejora de itinerarios de peatones.
Paralelamente, se ha llevado a cabo un cambio de infraestructura que incorpora rampas, teniendo en cuenta, además, la proximidad de una parada de EMT cuyos accesos no estaban adaptados hasta ahora a personas con movilidad reducida. Además, esta acción pacifica la circulación del tráfico rodado que entra en el paso inferior de la Petxina.
Como ha señalado el regidor de Movilidad Giuseppe Grezzi, “somos un gobierno que piensa en las personas y trabaja con las personas. El proceso participativo que culmina con este paso es sólo una muestra. Desde la Concejalía de Movilidad Sostenible trabajamos para mejorar una movilidad de peatones integradora en la ciudad de Valencia”.
Esta obra fue planteada por los vecinos a través del proceso de consulta ciudadana en los presupuestos de 2016 y ha supuesto una inversión de 50.000 euros.
Por último, y dentro también de las propuestas vecinales aprobadas en los presupuestos, se llevarán a cabo los trabajos para un nuevo paso de peatones en la avenida Campanar, a la altura del número 35, así como en la avenida Constitució con la calle Ángel Tomás García. Este último, además, incluirá la semaforización de la salida a la propia avenida, tal y cómo se ha informado desde la Concejalía de Movilidad Sostenible.
Estos cambios de racionalización de la movilidad peatonal responden a carencias en las vías y han sido demandados desde las propias asociaciones vecinales de las zonas afectadas, así como a los criterios de seguridad y adaptabilidad correspondientes.