Todos los grupos municipales del Consistorio, tanto del gobierno como de la oposición, ha aprobado que el Ayuntamiento de València inste a la Conselleria de Cultura para que se inicien los trámites para declarar Bien de Interés Cultural, como Bien Inmaterial, los toques tradicionales de campana, los manuales, y el toque del reloj de Sant Josep de la Muntanya por sus propias características.
En la moción se pide que el Ayuntamiento “inste e impulse, en colaboración con el resto de administraciones” la investigación, difusión y formación del ”oficio de campanero”, con el objetivo de “preservar, mantener y generar la tradición entre los valencianos en general y entre los más jóvenes en particular, disponiendo de un centro en la ciudad de València”.
Finalmente, en un tercer punto de la moción aprobada se pide “que en el actual proceso de modificación del Ordenanza de Contaminación Acústica, y para evitar futuras interpretaciones de la normativa en detrimento de un bien de tanta relevancia cultural, se proteja de manera expresa los diferentes toques de campana”. Un punto que evoca el reciente acuerdo que consiguió el Ayuntamiento de València entre un vecino del barrio de Carme y la iglesia de San Nicolás, enfrentados precisamente por el sonido que causaban los toques de la citada iglesia y que motivó una denuncia del vecino por exceso de ruido.