El alcalde de València, Joan Ribó, ha anunciado la posición dialogante del Ayuntamiento, sin dejar de «defender los intereses de la ciudad», en el intercambio de impresiones que pidió el Ministerio de Hacienda antes de la reunión del Consejo Rector de la Marina de València, que acogió «un acontecimiento de relevancia que debe gestionarse de la misma manera».
El Consejo Rector en un principio se iba a celebrar hoy, pero se ha pospuesto porque los representantes estatales han pedido tiempo para repasar los puntos del orden del día relacionados con las cuestiones económicas. En palabras del alcalde, «es absolutamente normal porque antes de hablar de unos asuntos tan importantes, como son las deudas del Estado, se deberán informar».
Joan Ribó ha recordado que fue el gobierno municipal el que forzó esta reunión y que algunas de las personas que tenían que reunirse no estaban hasta ahora como representantes de la entidad, así como que se va a tratar, «por supuesto, los más de 400 millones de deuda, y de la forma de afrontarla; un asunto que antes, en anteriores reuniones, no se ha abordado».
Para el Ayuntamiento, la posición de salida es que esta deuda se trate como el de las Olimpiadas de Barcelona o las Expos de Sevilla o Zaragoza. Pero, además, en la orden del día de dicha reunión del Consejo Rector de la Marina de València hay un total de 20 puntos, con asuntos de gestión diaria y otros como el equilibrio financiero.