Las numerosas personas que comparten sus vidas con animales de compañía podrán acceder con ellos a los autobuses urbanos, una vez se apruebe el nuevo reglamento de la EMT, que comienza ahora su tramitación. Se trata de una de las principales novedades que incluye el borrador del texto, que han presentado hoy el concejal de Movilidad Sostenible, Giuseppe Grezzi, y la concejala de Bienestar Animal, Glòria Tello.

Tal como ha explicado la concejala Tello, la regulación de la presencia de los animales de compañía en los autobuses de la EMT «es una medida que tienen ya vigente numerosas ciudades de Europa, y que supone democratizar y poner al mismo nivel los derechos de las personas que no tienen mascotas y las que sí las tienen; en definitiva, de equiparar derechos».

Para ello, se ha creado la targeta EMT Mascota, un título gratuito (sólo habrá que abonar los 5 euros de emisión de la tarjeta en sí) y personalizado, que deberán solicitar las y los dueños de los animales. Para poder acceder a los autobuses, las mascotas deberán viajar dentro de un transportín (de 45x35x25 centímetros), que se situará sobre el regazo o a los pies de la persona responsable del animal, con un máximo de tres animales por bus. Además de los lógicos requisitos sanitarios y de higiene a que estarán obligados, no se incluye a los animales exóticos, a los venenosos ni a los potencialmente peligrosos; y en caso de que algún pasajero o pasajera manifieste molestias o incompatibilidad, la persona dueña del animal deberá cambiar de lugar en el vehículo.

El personal de Servicio Municipal de Bienestar Animal ha realizado un amplio estudio previo, que ha incluido la normativa vigente en 18 ciudades europeas (entre ellas, Barcelona, Madrid, Sevilla, Zaragoza, Londres, París, Roma o Amsterdam). Una vez aprobado el reglamento, las personas interesadas deberán solicitar la Tarjeta EMT Mascota en el Servicio de Atención al Cliente de la EMT, y tendrán que aportar fotografía del animal y cartilla sanitaria con el calendario de vacunaciones en vigor. La tarjeta tendrá una vigencia de dos años, renovables. Esta nueva herramienta viene a complementar la regulación que ya existía sobre la presencia en los buses de perros-guía y de animales terapéuticos, que tienen un régimen especial y diferente.

El borrador del reglamento arranca su tramitación, de cara a su aprobación definitiva, una vez recogidas las aportaciones realizadas por de la ciudadanía durante un periodo de 45 días desde el pasado mes de agosto. El personal técnico municipal ha incluido estas aportaciones, y se ha elaborado un texto inicial que deberá ser aprobado por la Junta de Gobierno Local y, de manera inicial, por el Pleno Municipal, para ser sometido a información pública y recogida de alegaciones, para proceder a su posterior aprobación definitiva. Una vez concluido todo este proceso, el reglamento entrará en vigor, y las personas dueñas de animales domésticos podrán disfrutar de la nueva tarjeta EMT Mascota.

NUEVAS MEDIDAS DE SEGURIDAD

El nuevo reglamento incluye, además, otras novedades sobre la prestación del servicio y la organización de la movilidad urbana municipal. Entre ellas, el concejal Grezzi ha destacado, por ejemplo, la posibilidad de que los vehículos realicen paradas fuera de las marquesinas, por razones de seguridad o en horario nocturno, en respuesta a las inquietudes planteadas desde diversos colectivos sociales.

Otra novedad será que las personas invidentes o con movilidad reducida no tendrán ya la obligación de solicitar parada; es decir, que serán los conductores los que deberán detener el vehículo cuando vean a un ciudadano o ciudadana con diversidad funcional en la parada. Asimismo, y también en aras a la seguridad, durante las paradas de regulación que realizan los buses al final de las líneas, las puertas de los vehículos se cerrarán, tal como habían solicitado las y los empleados de la EMT.

También se introducen novedades de infraestructuras, como las paradas dobles; se hace uso por primera vez de lenguaje inclusivo en la redacción de la normativa; y se abre el acceso a todo tipo de vehículo de movilidad personal y a carritos dobles de bebé. Finalmente, el reglamento establece un régimen sancionador según la normativa legal por conductas contrarias a la convivencia y por el deterioro de elementos tanto de los vehículos como de las paradas.