Pilar Soriano, concejala de Compromís «el Parc Natural sufre un abandono por parte del PP, y lo hemos podido comprobar en el asunto de los barcos varados en la playa de la Garrofera o también en el lamentable estado del carril bici que va de València al el Parc Natural».
Los hechos ocurridos la pasada semana, que aún continúan, en las playas del Saler ha vuelto a mostrar la pésima planificación del gobierno del Partido Popular, y en concreto de la concejala de Playas Lourdes Bernal y del concejal de Devesa-Albufera, Vicente Aleixandre. Para Pilar Soriano «además de no tener en cuenta los efectos que la ampliación del Puerto ha acabado teniendo en las playas del Sur, con la grave erosión provocada, se añade ahora el encallamiento de dos barcos de gran tamaño que han provocado una degradación máxima de las playas, lo que ha provocado que incluso el puesto de socorrismo haya quedado dentro del agua», que ha añadido además que «la pésima gestión de la concejala Lourdes Bernal y del concejal Vicente Aleixandre, responsables de playas y Devesa-Albufera, ha agravado el problema, ya que la falta de previsión de lo que esos dos barcos iban a hacer que muchos ciudadanos fueron a verlos, ha provocado que mucha de esa gente, por desconocimiento, haya hecho perder uno de nuestros paisajes más valiosos, que además, nos ha costado muchísimo dinero, como es la recuperación del cordón dunar de la playa».
Por todo ello, desde Compromís vamos a pedir explicaciones por estos hechos en la próxima comisión de medio ambiente y propondremos también la correcta señalización del ecosistema dunar de El Saler, para que los ciudadanos puedan ser conscientes de que pisar esas dunas puede causar graves daños a las mismas y la flora y fauna que en ellas habitan.
Por otro lado, y prueba también de la dejadez que ha hecho el PP de todos los vecinos y vecinas de la zona es el lamentable estado del carril bici que conecta la ciudad con el Saler, ya que en muchas zonas del mismo están invadidas por matorrales, llenas de arena de playa o con las barandillas rotas. «Una situación lamentable», en palabras de Pilar Soriano.