El concejal de Compromís per València Sergi Campillo, junto a la diputada de la coalición en les Corts Paula Espinosa, han presentado el Plan Renatura que propone que se puedan renaturalizar el conjunto de patios de las escuelas de la ciudad. Para su elaboración plantea que el Ayuntamiento solicite a la Generalitat la competencia para poder actuar sobre las infraestructuras escolares para ejecutar los proyectos, y que la administración autonómica sufrague la inversión a través del Plan Edificante o cualquier otro mecanismo. Además, como explica Campillo, debe contar con la colaboración, el diálogo y el acuerdo con las comunidades educativas.
El concejal de Compromís Sergi Campillo ha presentado una moción en la Comisión municipal de Urbanismo, Parques y Jardines y Mejora Climática para impulsar un plan para renaturalizar los patios de las escuelas de València. Este plan, llamado Renatura, plantea actuar sobre un espacio de 6.000 metros cuadrados contando con centros de bachillerato, ciclos formativos, centros de adultos, educación especial, infantil, primaria y secundaria. La propuesta, que supone patios escolares renaturalizados y abiertos en el barrio, toma como base un estudio realizado por Las Naves dentro de los trabajos para poner en marcha la Misión Climática València 2030, un compromiso de la ciudad con la Comisión Europea para llegar a ser climáticamente neutra en 2030 y por el que València ha recibido reconocimientos como el de Capital Verde Europea para 2024. También esta acción está incorporada dentro de la Estrategia urbana 2030 y en el Plan Verde y de la Biodiversidad de la ciudad.
En este sentido, Sergi Campillo alerta de que la ciudad no tiene tiempo que perder en adaptarse a este reto ante la crisis climática. Recuerda que “hace pocos días el gobierno de las Islas Canarias tuvo que suspender las clases en toda la red educativa por la ola de calor que está sufriendo el archipiélago en pleno mes de octubre. Y València está en el epicentro de esta emergencia climática cuyas consecuencias ya estamos sufriendo”. Por eso considera que esta moción debería tener un consenso por partes de todos los grupos municipales y del gobierno “es una cuestión de responsabilidad, para garantizar la seguridad y la salud de los niños y niñas”. Campillo señala el hecho de que “una parte de los patios sea un bosque urbano o incluso un huerto urbano ayudaría a que los niños y niñas aprendan de la importancia de la naturaleza y al mismo tiempo sirva para bajar la temperatura del patio y de toda la zona de influencia del barrio”. Y es que, según el concejal, también podrían servir como jardines de barrio sobre todo aquellos que no disponen de una gran infraestructura verde y que están localizados gracias al Plan Verde y de la Biodiversidad, elaborado con el gobierno de Joan Ribó. «Si conseguimos que una parte de estos patios estuviera renaturalizada con árboles o huertos tendríamos una posibilidad de dotar de infraestructura verde a los barrios».
Respecto a cómo debe ponerse en marcha, el concejal de Compromís explica que “sabemos que el Ayuntamiento de València hace el mantenimiento de los centros escolares y no inversiones, pero también es cierto que en los últimos años la Generalitat con el gobierno del Botànic había facilitado la inversión por parte de los ayuntamientos a través del Pla Edificant. Por tanto, sí es viable jurídicamente que la Generalitat ceda esta competencia a los ayuntamientos para realizar inversiones. De hecho en la moción proponemos incluso que esta medida de renaturalización que se haría posible a través de un Pla Edificant propio”. Por eso, la moción plantea que “el Ayuntamiento solicite a la Generalitat la competencia para poder actuar en los patios escolares y ejecutar los proyectos, pidiendo a la administración autonómica que sufrague la inversión a través del Pla Edificant o cualquier otro instrumento legal y de financiación que estime oportuno”.
Por este motivo la moción se presenta de forma coordinada con el Grupo parlamentario de Compromís en Les Corts a través de una Proposición No de Ley. La diputada de la coalición Paula Espinosa destaca que “para abordar el reto climático, necesitamos un cambio del modelo de producción, consumo y también de adaptación de los espacios urbanos, sobre todo de aquellos en los que pasamos la gran parte de nuestro tiempo, tales como los espacios educativos. En este sentido, los centros educativos, juegan un papel fundamental como espacios de transformación y construcción de modelos que ayuden a abordar la crisis climática; y es responsabilidad de las administraciones dar el impulso y las herramientas necesarias para llevarlo a cabo”. Asimismo “son numerosos los estudios científicos que certifican que el contacto con la naturaleza repercute positivamente sobre la capacidad cognitiva, el bienestar y la salud, sin duda, condiciones que ayudan a mejorar el rendimiento del alumnado, mientras les proporciona múltiples oportunidades de aprendizaje”, ha concluido Espinosa.