El alcalde de València, Joan Ribó, se mostró ayer, al inicio del Consejo de Administración de EMIVASA, «muy satisfecho» porque a lo largo del año 2016, un total de 1.335 familias han evitado el corte de suministro de agua gracias al acuerdo al que llegó el Ayuntamiento con Aguas de Valencia. En total, se ha hecho frente al pago de 247.301,47 euros.

Así, el período de marzo a junio ha sido el que más familias han sido asistidas. Mensualmente, en marzo se atendieron 163 familias (lo que supone un total costeado de 20.483,58 de euros), en los meses de abril y mayo, 150 cada uno (con las cifras de pago total de 23.179,29 y 25.906,48 de euros, respectivamente), y finalmente, en junio de 2016 se atendieron 157 familias, lo que equivale a 33.525,11 euros de pago.

El alcalde y Aguas de Valencia acordaron en el mes de diciembre de 2015 que, en el caso de que una familia no pudiera costear la factura del agua, Aguas de Valencia se haría cargo del importe correspondiente al consumo de agua (la lo que ha supuesto 115.289’93 euros en facturas durante el 2016) y el Ayuntamiento de València, del importe correspondiente a tasas e impuestos (en total, 132.011’54 euros a lo largo del 2016).

Así, durante el año pasado, se han asumido 3.707 facturas, es decir, se ha facilitado el suministro de una media de 2’8 facturas por cada familia que no podía llegar a costearlas por problemas económicos. Ribó se refirió a estos datos y apeló «a la conciencia de las instituciones. Tenemos muy claro que la prioridad de nuestras políticas deben ser las personas, y más aún aquellas que lo están pasando mal”.

«Frente a aquellos que dicen que la situación económica en España es próspera sólo hay que enseñarles estos datos. No debemos permitir que el rescate de la banca se deje por el camino a las personas víctimas de una crisis que ellas no crearon”. De este modo, el alcalde Joan Ribó manifestó la continuidad de esta iniciativa para todo este año y la voluntad de trasladarla a otras empresas energéticas, para impedir los cortes en el suministro de la luz, así como el desahucio por impago de hipoteca.

Este convenio establece que el Servicio de Bienestar Social e Integración del Ayuntamiento de València disponga de fondos a justificar para la gestión de las ayudas de emergencia para estos pagos. Este servicio se encarga de valorar las solicitudes de ayuda recibidas, y comunicar a EMIVASA las facturas que deben ser atendidas. «El objetivo final es atender a las personas en riesgo de exclusión social en servicios tan básicos como el suministro del agua. Es una cuestión de decencia que las instituciones se preocupan y se ocupan de estos casos», concluyó Ribó.