La EMT publicó hace unos días la licitación (enlace) de una asistencia técnica para crear una bolsa de trabajo para la contratación de 20 oficiales de infraestructura y flota. A pesar de la reducida cifra de plazas para la cual se convoca, y que la duración del trabajo será de solo tres meses, la licitación para hacer el examen y ordenar a los candidatos para cubrir las 20 plazas ha salido con un precio de licitación de 195.000 euros. Un importe, como comentan desde Compromís, que contrasta con los 31.200 euros de precio base de licitación del último proceso de selección parecido realizado en 2021 para crear la bolsa con la cual cubrir las plazas vacantes de oficiales de técnica (que finalmente se adjudicó por 23.400 €).
“Nos genera muchas dudas este contrato de cerca de 200.000 euros para crear una bolsa de trabajo para cubrir en los próximos meses solo 20 plazas de mecánicos especializados en reparación de buses. Las cifras no nos cuadran porque parecen estar muy por encima de los costes de procesos similares en años anteriores, e incluso superiores a los del proceso de selección para conformar nuestra bolsa de trabajo por 500 conductores”, apunta Giuseppe Grezzi, en relación con aquella licitación realizada por el gobierno de Compromís, la más grande realizada en mucho de tiempo por la EMT, y que salió con un precio de 176.000€. Por este motivo, ha añadido, “preguntaremos en el consejo de administración para que se den todas las explicaciones y detalles de esta licitación, deseando que sean convincentes y que no haya ninguna cosa rara.”
Y es que, como apunta Grezzi, esta anomalía se suma a la que empieza a ser ya una larga lista de extrañas contrataciones por el gobierno de Maria José Català, a pesar de llevar poco más de medio año operativo, y con el recuerdo muy presente de todas las que se llevaron a cabo en el último gobierno municipal liderado por el PP, los máximos responsables del cual se sientan estos días en el banquillo. “Se tiene que hacer un uso muy escrupuloso del dinero público, algo a lo que el PP no está muy acostumbrado, a la luz de los graves antecedentes como estamos comprobando en el juicio de una de las tramas de financiación ilegal de las campañas de Rita Barberá; y también de algunas de las contrataciones del gobierno de PPVOX de la señora Català, caso de las recientes cabalgatas, donde hay sospechas de contratos troceados, costes por encima del mercado y otras cosas raras. No permitiremos de ninguna de las maneras que haya pasos atrás en la gestión honesta de los fondos públicos ni que empiecen a darse contratos a dedo que igual buscan hinchar los precios para volver a pagarse la fiesta a expensas de la gente”, ha resumido Grezzi.