En sólo 8 meses de gobierno del PP y Vox, la formación valencianista ha presentado 10 quejas al Síndic de Greuges y 89 recursos de amparo a alcaldía por la negativa de Catalá a facilitar el acceso a la información y a responder a las preguntas hechas por los grupos de la oposición. La portavoz de Compromís per València Papi Robles denuncia una vulneración de derechos, incluso a las entidades vecinales y sociales a quienes se ha quitado la posibilidad de participación en los debates municipales como ha ocurrido ya en las comisiones.
La portavoz del Grupo municipal de Compromís Papi Robles y el concejal Ferran Puchades, han criticado «la actitud obstruccionista del gobierno de Catalá que hace interpretaciones parciales y partidistas de los reglamentos para no dar información ni responder a la oposición». Una actitud que, como ha señalado Robles, «no nos sorprende de la actual alcaldesa que cuando fue consellera en la Generalitat los juzgados ya le recriminaron en 6 ocasiones la falta de transparencia de su gestión».
Como ha relatado la portavoz de Compromís “en esta nueva etapa en el Ayuntamiento de València, Catalá primero alejó a los grupos de la oposición del edificio municipal con la voluntad de blindar este espacio como si fuera su bunker privado, después recortó el número de comisiones municipales para reducir la capacidad de control a la acción de gobierno y ahora también expulsa a las entidades vecinales y sociales de las comisiones impidiendo que participen en los debates”. Una situación que, como denuncia Papi Robles, «es una clara vulneración de los derechos de la ciudadanía».
El concejal Ferran Puchades ha explicado que “de las 10 quejas presentadas por Compromís a la Sindicatura de Greuges, 5 ya han sido admitidas y nos han dado la razón recriminando a la actitud de Catalá que no nos ha facilitado la información, el resto todavía están estudiándose”. Para Puchades, «hay una clara intencionalidad de esconder la información, dilatando los plazos, dando respuestas incompletas o simplemente negando la información, para disuadir a la oposición de hacer nuestro trabajo». Ahora bien, como destaca el concejal, “Catalá se ha encontrado con una oposición diferente a la que tuvo Rita Barberá que vivió muy cómoda durante 20 años hasta que entró en el Ayuntamiento Compromís. Nosotros vamos a seguir haciendo trabajo día a día revisando expedientes y resoluciones para evitar volver a los tiempos de la oscuridad que caracterizan a los gobiernos del PP”.
La portavoz de Compromís advierte a Catalá que “aunque gobierna, nosotros somos la oposición y vamos a hacer lo que tenemos la obligación de hacer y es un seguimiento y un control de la gestión de gobierno para saber dónde va destinado el dinero público, además de seguir trasladando todas las propuestas de mejora para la ciudad”. En este sentido, Papi Robles recuerda que “los casos de corrupción del PP, algunos de los cuales todavía están juzgándose, esconden tras de sí la opacidad de la gestión de los gobiernos de derechas, haciendo y deshaciendo, impidiendo que la oposición pudiera actuar. Pero ahora, gracias a los gobiernos progresistas como el del Botànic en la Generalitat, se han establecido mecanismos para que esto no vuelva a ocurrir como la Ley de transparencia o la Agencia Antifraude”.